𝐋𝐀 𝐕𝐄𝐑𝐃𝐀𝐃𝐄𝐑𝐀 𝐂𝐎𝐌𝐏𝐀𝐍̃𝐄𝐑𝐀 𝐃𝐄 𝐄𝐃𝐖𝐀𝐑𝐃━━CREPUSCULO.

11 | Inevitable

Genesis Blossom.

El avión apenas aterrizaba, mis dedos entrelazados con los suyos jugaban tratando de despertarlo.

Si mis poderes se habían desarrollado lo suficiente para a ambos dejarnos en forma de humanos.

Aun que el no había parecido sorprenderle, sentí como pe apretaba la mano antes de rápidamente pasar su mano por mi nunca acercándome a su rostro.

—Buenos dias—Dijo con la voz tan baja y tan ronca que hizo estragos en mi cabeza.

—Hola—Le sonreí antes de bajar una mano por su pecho para dejar que me diera un corto beso en los labios.

—No sabes cuanto espere el momento en que pudiera hacerlo cuanto y cuando lo deseara—Dijo dejándome en las nubes.

—Te amo—Dije en respuesta sintiendo como el parecía complacido por dos simples palabras.

—Y yo a ti—Tomó mi cuello con ambas manos sin lastimarme.

Lo abraze dejando mi cabeza en su pecho unos segundos hasta que escuché un sonido de molestia.

Mire hacia delante viendo a una mujer de edad media, tal vez cincuenta o sesenta años. Edward rio mientras a mi me daba cierta vergüenza.

Paso por nuestro lado y eso me hizo darme cuenta de que teníamos que bajar.

—Hay que irno—Hable parandome, parandome frente de él tratando de bajar mi maleta de mano.

Sentí sus manos en mi cintura jalando hacia el dejándome sentada en su regazo.

—Estamos en un avión—Hable acariciando levemente su cuello con una mano.

El me miró sonriendo, sin embargo dejé que me abrazara unos segundos hasta que ya no pude con la vergüenza.

—Vamos, ¿O quieres pasar aquí nuestras vacaciones?—Pregunte sonriente.

—Si es contigo mi amor—Hablo el, sonreí mirándolo algo perpleja, nunca me había dicho así y escucharlo me hacia sentir las famosas mariposas que solo solo me hacía sentir—Incluso en la calle lo disfrutaría.

Lo tome del cuello por impulso dejando un beso en sus labios para después abrazarlo con una sonrisa.

—Vamonos—Dije parandome mientras el lo hacía de inmediato pegando su cuerpo al mío.

—Bien..—Hablo bajándome la maleta de arriba del porta equipaje.

Trate de tomarlo de su mano pero no me dejó, simplemente tomo su mochila. La puso sobre su hombro y llevó mi maleta hasta afuera del avión, mientras tomaba mi mano.

—Tengo hambre—Hable mientras acariciaba levemente su mano con mi pulgar.

—Comiste todo el vuelo—Hablo dejando de lado la maleta mientras nos estábamos en una banca, mientras buscaba dinero.

—Si, pero la comida de los aviones es asquerosa—Hable haciéndolo sonreír.

—A mi me gusto—Hablo el mientras que yo alzó las cejas.

—Claro que te gusto, llevas 120 años sin probar bocado—Hable mientras reía, el río conmigo.

—Como digas—Hablo el mientras se paraba, lo mire unos segundos.

—¿A donde vas?—Pregunte.

—Voy a cambiar mi dinero para que podamos hacer algo en este país Gene—Hablo y yo sonreí.

—Mi amor sonaba mejor—Dije en cuanto el volteo y me miró por encima de su hombro.

—Espérame unos minutos mi amor—Sonreí mientras el iba a aproximadamente unos 20 metros para formar la fila a cambiar el dinero.