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Cuerpos sudorosos, risas desde el costado de la cancha, corazones acelerados y piernas adoloridas. Si Atsumu tuviera la oportunidad de describir cómo eran sus prácticas de voleibol cada día, podría decir eso. Sin embargo, no era una molestia para él asistir a sus entrenamientos, amaba el voleibol, compartir tiempo con sus amigos y podía estar más cerca de ese precioso chico que había sido su crush durante los últimos 6 meses.

— Buena práctica, chicos, nos vemos mañana a la misma hora. — habló el entrenador seguido de dirigir su mirada hacia Atsumu. — Tú no vuelvas a llegar tarde. — el rubio levantó sus manos en su defensa mientras una sonrisa traviesa aparecía en su rostro indicándole que no tenía otra elección.

— Hey, Tsumu. — Kuroo se acercó al mencionado casi corriendo.

—¿Qué pasa? — preguntó Atsumu mientras tomaba un poco de agua.

— ¿Cuándo demonios lo vas a invitar a salir? — el rubio casi escupe todo el agua cuando escuchó las palabras imprudentes y muy altas que su amigo acababa de decir.

Tomó del brazo a Kuroo y, asegurándose de que nadie estuviese poniéndoles demasiada atención, lo llevó a un lugar bastante apartado de los demás.

— ¿Podrías ser menos imprudente? — Kuroo puso los ojos en blanco ante la pregunta de su amigo.

— Es absurdo, llevas meses babeando por él y no eres capaz de dirigirle la palabra por más de 3 segundos. — Atsumu suspiró.

— Sabrás que no es mi fuerte coquetear con hombres y menos si no sé su orientación sexual. Piénsalo, podría poner las cosas incómodas para el equipo si llego a declararme y el chico no es gay o, al menos, bisexual. — Kuroo volteó a ver "discretamente" hacia donde estaba el chico del que estaban hablando.

— ¿Por qué no solo le preguntas y ya? — Atsumu comenzó a reír. — ¿Qué?

— ¿Estás loco? de cosa puedo responderle los buenos días, no voy a preguntarle si le gustan los hombres. — Kuroo se encogió de hombros.

— ¿Y si intentas buscar sus redes y ver si comparte algo relacionado con eso? — Atsumu lo miró con los ojos iluminados.

— Eres un maldito genio. — Kuroo enarcó una ceja.

— Solo es una estrategia básica, aprende a stalkear gente, señor aburrido. — Atsumu frunció el ceño.

— No es como si tú fueses el mejor stalkeando. — Kuroo se encogió de hombros curvando una presumida sonrisa.

— Lo soy. — admitió con aires de superioridad.

— Sí, por eso te le declaraste a Tsukki sin saber que tenía novio. — Kuroo se puso serio.

— Errores del pasado.— Atsumu sonrió y comenzó a caminar hacia sus cosas para poderse ir e iniciar su investigación de la vida del chico.

— Nos vemos mañana.— dijo el rubio antes de salir del lugar, prácticamente, corriendo.




— Nada, no hay nada.— gritó Atsumu frente a su computadora llamando la atención de su hermano gemelo.

— ¿Y ahora qué te picó? — Osamu lo miraba con desaprobación.

— ¿Recuerdas el chico del que te platiqué a inicio de año? — Osamu lo miró confundido. — El que practica voleibol conmigo. — otra mirada confundida por parte de su hermano. — El que me saludó en la cafetería y yo, básicamente, dije hola y corrí. — Osamu sonrió.

— Ya sé quién. — Atsumu suspiró.

— Me sigue gustando mucho, pero nunca platica sobre su vida privada.— Osamu se acercó a la computadora y miró la foto de perfil del chico.

Daylight [SakuAtsu]Opowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz