𝙻𝚊𝚜𝚝 𝙵𝚒𝚛𝚜𝚝 𝙺𝚒𝚜𝚜 / 𝚊𝚕𝚕 𝚘𝚏 𝚞𝚜 𝚊𝚛𝚎 𝚍𝚎𝚊𝚍 [ᴴᵃⁿ ᴳʸᵉᵒⁿᵍˢᵘ]

Ｃｈａｐｔｅｒ ４

❝ ʟᴀ ᴍᴀɢɪᴀ ᴄᴏᴍᴇɴᴢᴏ́ ᴇɴ ᴇʟ ᴍᴏᴍᴇɴᴛᴏ ᴇɴ ǫᴜᴇ ᴛᴇ ᴠɪ
ʜᴀɢᴀᴍᴏs ᴜɴ ʜᴇᴄʜɪᴢᴏ ᴍᴀ́ɢɪᴄᴏ ᴄᴏɴ ᴛᴜs ʟᴀ́ɢʀɪᴍᴀs

ᴇɴᴛᴏɴᴄᴇs ɴᴏ ʜᴀʙʀᴀ́ ᴍᴀ́s ʟᴀ́ɢʀɪᴍᴀs

ᴘᴏʀ ғᴀᴠᴏʀ sᴇ́ ᴍɪ ᴇᴛᴇʀɴɪᴅᴀᴅ
ᴘᴏʀ ғᴀᴠᴏʀ ᴅɪ ᴍɪ ɴᴏᴍʙʀᴇ

ʜᴜʏᴇ
ʜᴜʏᴇ

ʜᴜʏᴇ ᴄᴏɴᴍɪɢᴏ
ᴇɴ ᴇʟ ғɪɴ ᴅᴇʟ ᴍᴜɴᴅᴏ ᴊᴜɴᴛᴏs ᴘᴀʀᴀ sɪᴇᴍᴘʀᴇ... ❞

Rυɳ αɯαყ - TXT

Yuri sintió cómo era cargada con la intención de que se pusiera de pie y comenzará a correr lejos de lugar. Gyeongsu envolvió su mano en la muñeca de la chica y la comenzó a guiar por los pasillos de la escuela hasta poder llegar a un lugar seguro.

Se dirigieron hacia las escaleras para poder subir hacia el salón al que pertenecían pero chocaron contra una de esas cosas ensangrentadas, haciendo que el chico separé su mano de la muñeca de ella. Gyeongsu estaba en el piso con el horrible sujeto encima de él mientras trataba de zafarse de su agarre y evitando que le pueda dar algún mordisco.

Yuri se arrodilló en el suelo, manchando sus blancas medias con la sangre que había por ahí, y comenzó a empujar a la persona que estaba encima del chico, ayudándolo. Cuando lo logró, Gyeongsu empujó con fuerza a la otra persona por las escaleras y entrelazó su mano con la de la japonesa para comenzar a correr de nuevo.

Cuando lograron pasar sin ningún tipo de problema por todos los pasillos y escaleras para poder llegar sanos y salvos a su salón, el chico intentó abrir con fuerza la puerta para poder ingresar, pero parecía que alguien estaba haciendo fuerza del otro lado de la puerta para impedirles el ingreso. Yuri se giró hacia atrás de ellos, encontrándose con que una de esas cosas venía directamente a ellos.

- Gyeongsu... - le susurró en japonés, con miedo.

Al parecer el chico logró ver lo mismo que ella ya que intentó con más fuerza abrir el pedazo de madera, algo que parecía imposible. Y cuando Nakamoto creyó que era su fin, que iba a morir porque no lograron abrir una puerta, una de las maneras "más tonta" de morir en un apocalipsis, según ella, sintió cómo era empujada hacia dentro del aula y luego ingresaba su chico, para posteriormente cerrar la puerta y apoyarse en ella, con la respiración agitada, para que ésta no se pudiera abrir.