Capítulo 9

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AVISO: contenido algo explicito sexual. 

Victoria entró con cierta desesperación al baño de las mujeres y según vio el primer cubículo abierto y vacío, se metió de lleno en él junto con Avril, la cual estaba más que desesperada con que empezara lo que les esperaba a la rubia y ella.

Tras estar las dos en el cubículo, Victoria cerró la puerta con pestillo detrás de ella y según se aseguró que la puerta no se abría, se dio media vuelta y casi de inmediato se echó a los labios de Avril.

La morena tuvo la fuerza suficiente como para dirigir a la bajista hacia la pared de aquel sitio y acorralarla. Cada vez el ambiente estaba más y más caliente, haciendo que la mano de Avril se fuera hacia dentro de la camiseta de la rubia. Esta se esperaba que la rubia le apartara la mano, sin embargo se sorprendió al ver que la rubia le dirigía ambas manos hacia sus dos pechos. Avril se sorprendió bastante al notar que la rubia no llevaba sujetador, y le sorprendió mucho más que esta tuviera un piercing en el pezón.

Avril, después de liberarlo un poco en su cabeza, decidió que era buena idea quitarse la camiseta. Se apartó ligeramente del beso y en menos de cinco segundos su camiseta se encontraba encima de la tapa del váter. Tras volver al beso, agarró a Victoria de los muslos y la subió, haciendo que esta enredara sus piernas alrededor de su cintura. Esta vez fue Victoria la que llevó sus manos al busto de la otra chica.

Poco a poco, la cosa llegó a que ambos torsos de las dos chicas estuvieran desnudos y que a Avril comenzara a bajar sus besos por el cuerpo de la rubia. El cuerpo de esta se estaba estremeciendo cada vez que cada beso de Avril iba más abajo. La morena estaba disfrutando cada uno de los suspiros y escalofríos de la rubia, le encantaba que ella provocara eso en el cuerpo de la bajista. Finalmente, después de un tiempo torturador para Victoria, Avril por fin llegó a su destino. Iba a adentrarse dentro de la falta de la rubia, pero se frenó, para luego salir de ella un momento para mirar a la rubia, haciendo que esta se desconcertara:

—¿Te parece bien si...— no le dio tiempo a acabar porque la rubia agarró la cabeza y con algo de delicadeza y desesperación la llevó a dentro de su falta, haciendo que la morena se tomara eso como un "si" de parte de la rubia. Rápidamente pudo notar la gran humedad que tenía la rubia en su entrepierna. Tras apartar la tela que cubría la intimidad de la rubia, todo sucedió muy rápido. Cuando Avril comenzó sus movimientos con la boca, la rubia no paraba de suspirar y de vez en cuando gemir. Por miedo a que las pillaran, pasó de utilizar su boca a utilizar sus dedos para estimular a la rubia, así que se puso de pie y volvió a juntar su boca con la de la rubia para silenciar los gemidos de la rubia, que cada vez eran más altos.

Después de unos segundos siguiendo con los movimientos dentro de la rubia, finalmente Victoria llegó a su punto más alto, haciéndoselo saber a Avril haciendo más rudo su beso y mordiendo el labio inferior de esta. La morena sacó sus dedos de la rubia y separó ligeramente sus labios de los de ella. Victoria dejó caer su cabeza, haciendo que chocara en la pared del cubículo. Avril veía a la rubia detenidamente. Su pecho subía y bajaba seguidamente, y su respiración era muy pesada. La rubia puso derecha su cabeza y apoyó su cabeza con la de la morena. Cuando sus miradas por fin se encontraron, una sonrisas aparecieron dibujadas en las dos caras de las chicas:

—¿Te ha gustado?— le preguntó Avril a Victoria, temerosa por la respuesta de la rubia.

—Pienso que la marca que te dejé en el labio ya te da una respuesta.— contestó la rubia, haciendo que la morena arrugara el entrecejo, haciendo que Victoria concretara su respuesta.— Si, me ha encantado.

Después de una última risa y unos cuantos besos más, por fin se vistieron y salieron del cubículo y del baño. Con una sonrisa de oreja a oreja fueron hasta la barra, donde sorprendentemente se habían encontrado a los tres chicos con lo que habían venido:

—Hombre, por fin podemos ver a las dos desaparecidas. — dijo Damiano apoyando su bebida en la barra.

—No estábamos desaparecidas, estábamos en la pista de baile. — dijo Victoria. El cantante no se lo creía, y sabía que era una mentira, ya que nunca vio a su amiga tan sonriente, pero decidió callarse.

Después de unas cuantas horas en aquella discoteca bailando, bebiendo y sobre todo pasándolo bien, los chicos decidieron irse -en realidad no lo decidieron ellos, lo decidió el encargado ya que la discoteca ya le era hora de cerrar-. Ambas chicas, se despidieron de los otros chicos con un abrazo a cada uno y cada uno se fue a su respectivo coche:

—Avril.— llamó Victoria a la chica, la cual centró su atención al momento en la rubia.— ¿Te llevo a tu casa o... prefieres dormir en mi casa?

A Avril se le formó una sonrisa en la cara ante la proposición de la bajista.— Prefiero ir a tu casa.

Después de esa conversación, Victoria emprendió camino a su casa, rogando y rezando para que ningún control de alcoholemia le parara por el camino. Sorprendentemente, luego de veinte minutos en coche llegaron a la casa de la rubia, y sin que ningún control les parara de por medio.

Luego de aparcar el coche, ambas se bajaron del vehículo de la rubia y se fueron al piso de esta. Con bastante torpeza, la bajista consiguió abrir el portal del edificio y la puerta de su casa. Ambas, después de que por fin consiguiera abrir la puerta la rubia, pasaron al piso de la rubia y siendo Avril guiada por la rubia, las dos llegaron a la habitación de esta. Ninguna se molestó en ponerse un pijama y simplemente se desvistieron hasta quedarse las dos con solamente su ropa interior baja. Para la suerte de ambas, la cama de la rubia era lo suficiente grande como para que pudieran dormir las dos en ella:

—Buenas noches, Vic. — dijo Avril acabando de acomodarse en la cama de la rubia.

—Buenas noches, mi mejor polvo. — dijo Victoria dándole un beso tierno en los labios a Avril, para luego acomodarse y acurrucarse en el pecho de esta, siendo rodeada por los brazos de la morena. Finalmente, por las caricias que le daba en el pelo la morena, Victoria se quedó completamente dormida en cuestión de segundos y Avril, al cabo de unos minutos escuchando la respiración tranquila de la rubia, también quedó dormida pensando en el día maravilloso que había tenido y en la maravillosa chica que sostenía entre sus brazos.

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Hello :)

¿Qué tal estáis?

¿Os ha gustado el capítulo de hoy?

Había planeado que este capítulo fuera subido hace bastante, la verdad, pero no tuve tiempo para hacerlo... Pero bueno, ¡¡Por fin lo tenéis!! JAJSAJ

Decidí acabar de reforzar la amistad entre Avril y Victoria en este capítulo JAJSAJLFHALSJ 😏😏 

Es mi primera vez escribiendo este tipo de contenido (entre chicas), así que perdonar si tengo algún error. Espero que todo estuviera bien escrito. Si alguien tiene alguna queja sobre algo, que me lo diga y que me explique.

Espero veros prontito y gracias por todo el apoyo que estoy recibiendo❤️

Kisses <3

¡Chili! ||Victoria de Angelis||Where stories live. Discover now