Celo y visita inesperada.

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Draco empezaba a odiar a su alfa interior. El día del baile bailo con Harry hasta las primeras luces del alba, Harry lo guío por la pista y Draco encantando se dejó llevar. Hablaron, tontearon y sobre todo, coquetearon.

Draco detestaba ser alfa en esos momentos porque no podía dejar de querer estar con Harry en todo maldito momento. Odiaba cuando llegaba con el aroma de otro alfa porque se peleó con alguien en los pasillos y detestaba no haber estado ahí para defenderlo.

Aunque si lo digiera en voz alta Harry le habría lanzado tantos hechizos que la enfermera no sabría quién era. O peor sacaría su lado muggle golpeándolo a puño limpio por creer que necesitaba que en estúpido alfa lo defendiera. Pero maldición eso no evitaba que lo quisiera hacer.

Lo peor es que no encontraba el momento para volver a hablar con Harry, siempre andaba con ese idiota de Ron Weasley rodeándolo con su aroma o con Granger que parecía querer marcarlo con su aroma para que ningún otro alfa se le acercara. No podía dejarlo solo para que su exquisito olor no se contaminara. Aunque claro, esa era precisamente la idea.

Draco respiro sintiéndose ahogado. La sala común estaba desierta por ser horario de la cena, pero Draco había sentido mareo, calor y un serio problema para controlar sus hormonas ese día, aunque aún faltaba un par de días para el celo y era inútil tomarse la posición supresora ahora, aún faltaba.

Decido salir un rato a tomar aire solo para dejar de respirar su viciado aroma. Los pasillos de la mazmorra estaban vacíos y la suave corriente de aire lo refrescaba. Pero toda su tranquilidad desapareció para que un celo rápido y despiadado llegara.

"Draco" pregunto Harry mirándolo. No traía el poleron de Weasley y todo su aroma dulce le llego a los pulmones de Draco como un afrodisiaco. En menos de dos segundos besaba con desesperación a Harry contra la pared de la mazmorra.

El olor de Harry era demasiado, las manos de Draco le picaban por recorrer cada centímetro del cuerpo del omega, recorrer esas piernas, esa cadera que hacia rozar contra la suya tan bien. Su mandíbula dolía de las ganas que tenía de morderlo, marcarlo. AHORA.

No puede hacer esto.

Un fragmento de conciencia lo hizo separase, pero el ver a Harry sonrojado y con los labios entreabiertos lo hizo volver a juntarse. Bajo besando hasta el ombligo de Harry. El pantalón de Draco ya era demasiado apretado y sus dientes parecían afilarse para morder a Harry.

"Acá no" Draco quiso protestar pero Harry ya lo estaba jalando hasta la sala común, Draco dijo la contraseña rápido para besarlo y tirarlo contra uno de los sillones. Se acomodó entre las piernas de Harry iniciando una rápida fricción, Harry gemía atrayéndolo para besarlo. Draco se bajó un poco el pantalón y tuvo que morder el labio de Harry para no morder otro lado. "Acá tampoco"

Draco levanto a Harry como si no pesara nada y lo llevo hasta su pieza. Harry más que cómodo con el nuevo lugar se arrastró hasta Draco para besarlo. Soltó más hormonas y ronroneo bajo mientras Draco le olorizaba el pelo.

Harry lanzo a Draco contra la cama y lo hizo sentarse. Se lamio los labios, gesto que solo puso aún más caliente a Draco y se agacho hasta el calzoncillo.

"Harry" gruño quitándose la ropa interior. "Tranquilo, lo he hecho antes" dijo dando una larga lamida en respuesta al gruñido de Draco.

No le gustaba para nada la idea de que Harry ya hubiera hecho esas cosas antes. Pero todo ese enojo se pasó cuando Harry le beso los muslos y se metió de una sola tirada todo el miembro de Draco a la boca.

El fuerte olor, las sensaciones todo mareo a Draco que solo afirmo con fuerza el pelo de Harry y marco el ritmo que su cuerpo le demandaba.

Draco estaba más que sorprendido porque nadie se hubiera dado cuenta de que Harry había estado ahí, recordaba claramente todo lo ocurrido y como su maldito celo había llegado antes, como Harry se la había chupado tan bien mientras él le embestía la boca – de verdad de debía disculpar por eso – con poca o nula consideración por la respiración del otro. Cuando el Draco se corrió en su boca Harry se levantó y le susurro.

Harry Potter es un omegaWhere stories live. Discover now