La Hermana de Buzz || El Teléfono Negro

Capítulo 25

El silencio en el desayuno era igual de aburrido que todos los días, lave rápidamente mis dientes y tome mis cosas esperando a Buzz en la sala. Está vez no podía disimular los golpes que me había dado pues mi labio estaba un poco hinchado y partido del lado izquierdo

-Hablare contigo cuando regreses de la escuela -dijo mi padre sentándose frente a mi

-Es algo malo -pregunte con miedo

-No -me vio directamente a los ojos, iba a decir algo pero Buzz salió de su habitación

-Vamonos -dijo viéndonos, asentí y solo ví a mi padre quien no nos dejó de ver -Que te decía -pregunto una vez fuera de la casa

-Nada importante -dije sin verlo -Supongo que me golpeara cuando regrese -el aire helado chocaba con mi cara haciendo que me diera escalofríos

-Aunque no me creas , odio ver qué lo haga -volteo a verme pero no le hice caso

-Para lo que me importa -conteste sin ninguna expresión, estaba pensando seriamente en hacerle caso a Robin e irme con el y su tío

El silencio se hizo presente hasta llegar a la escuela donde ambos nos dividimos, mi primera clase comenzó aburrida como siempre pero tenía que prestar atención pues últimamente había estado fallando mucho en la escuela, a veces me quedaba en algún lugar con Robin o simplemente nos escapabamos

Pensaba como le diría a Robin lo que había pasado con mi padre, no le iba a gustar escuchar lo que me había dicho y no quería preocuparlo

La hora del almuerzo llegó y tenía que buscar a Robin, ya no me importaba si mi hermano nos veía o no, lo busque en la cafetería pero no estaba al igual que Finn así que fui a buscarlo al patio donde entrenaba Finn, al pasar por un pasillo escuché la voz de Preston

-Ya dilo Robin -dijo entusiasmado

-No hace falta -contesto serio, estaba dispuesta a irme pero lo que dijo me hizo quedarme -Ella no me importa -

-Pero está enamorada de tí -se burlo Preston

-No me importa la verdad, saben que solo la utilizo para joder al estúpido cara de zanahoria -hablo con burla

-Robin -se escucho la voz de Fin regañarlo

-Cuando Ashley se enteré va a querer morirse -repitió Preston con burla -Y cómo es cuando están juntos -

-Un fastidio -contesto Robin haciendo que algo dentro de mi se rompiera, comencé a sentir un dolor muy fuerte en mi estómago -No la soporto -

-Cada que te le acercas te imaginas a Buzz -volvio a burlarse Preston y decidí ponerme frente a ellos -Ashley -dijo sorprendido

-Eres un idiota -vi a Robin quien me veía sorprendido

-Ash yo -antes de que hablara le di una cachetada

-No -me aleje de él -Estabas jugando conmigo -

-No, no es cierto -se defendió -Lo dije por qué -interrumpí gritándole

-Cállate, solo cállate -me aleje de él

-Ashley escuchame -se acercó a mi, sus ojos estaban llorosos

-Siempre fue por Buzz -dije y voltee hacía un lado donde el se encontraban -Mi peor error fue haber confiado en ti-

Trato de hablar pero me di la vuelta y salí corriendo, tome mi mochila y salí de la escuela. Cómo fue capaz de hacerme eso y como es que fui tan tonta para no verlo, mientras caminaba por las calles no paraba de llorar, de mi mochila saqué un frasco de pastillas, eran las que llevaba de repuesto

No había nadie en la calle, solo yo y más adelante de mi una van negra. Me lleve a la boca tres pastillas para que hicieran mayor efecto, pase al lado de la camioneta y detrás de mi se escuchó un ruido, voltee y vi al hermano de Max en el suelo

-Esta bien -dije aún con las pastillas en la mano

-Si solo que no ví por estos estúpido lentes -los señaló riendo -Tendré que ir por más -dijo viendo sus cosas tiradas en el piso

-Dejeme ayudarle -me agache y le ayude a pasarle varias de sus cosas

-Gracias -contesto, mi vista estaba en el suelo cuando de pronto su brazo quedó frente a mi, me quedé perpleja al ver que la pulsera que tenía era la de Billy, la pulsera que compartía con el -Encajan perfectamente -dijo viéndome

Lo ví a la cara y todos los flashbacks llegaron a mí de golpe, la niña de Carolina, Max hablándome de su hermano, todo estaba encajando

-Usted -fue lo único que dije antes de salir corriendo, deje mi mochila junto con las pastillas aventadas en la acera

Corrí por varias calles y la camioneta venía detrás de mi, intentaba gritar pero mi voz no me daba para eso, mis piernas parecían no cansarse hasta que la camioneta se aventó sobre mi y caí al piso

-Mi niña traviesa -dijo bajando de la camioneta -Nos vamos a divertir -fue lo único que escuche antes de que todo se volviera negro