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- SeongHwa que hacemos aquí? - pregunto el pelinegro de ojos nueces algo molesto, San había ido arrastras al centro comercial con su hermano mayor porque según el tenía que ver algo de su bebé pero por si fuera poco su hija SooJin se le pego como chicle!. - vamos a las tiendas de bebés o...
- yo no hablaba de eso! - San encarno una ceja hasta que entendió lo que su mayor quería decir.
- ¡Oh, No! ¡Estás loco! ¡No me jodas!¡No lo haré! - dijo cruzándose de brazos y frunciendo su seño.
- vamos Choi, amas a tu omega ¿No?
- si... - dijo desviando la mirada un tono rojizo en sus mejillas.
-Entonces vamos a la tienda de joyería! - exclamó el ojigris tomándolo de su brazo y su sobrina a su lado.
- espera... - dijo llevándolo arrastras a la joyería. - ¡SeongHwa te mataré!
- eso será después de la luna de miel hermano!
- ¡AY!
[🍯✨]
- no se porque te hice caso!
- Y que anillo vas a comprar? - miro de reojo a su menor con una sonrisa quien miraba la vitrina con anillo de compromiso.
- si Papi... El maestro HongJoong se pondrá Muy feliz! ¡Tiene que ser un anillo fabuloso! - exclamó sonriendo.
- ambos me ponen nervioso!
Dijo frunciendo el entrecejo, suspiro bajando la cabeza para luego subirla y ver a su hermano y pequeña sonrió y volvió a ver la vitrina donde había demasiados anillos de compromiso, eran hermosos y algunos eran extravagante pero el no buscaba eso San solo quería un lindo anillo que combinará con las hermosas manitas de su omega, volvió a suspirar cuando la voz de una chica lo saco de su trance.
- ouh! ¡Tengo por acá muchos, venga conmigo! - el pelinegro solo asíntio.
[🍯✨]
- No puedo creerlo llevamos tres horas en el centro comercial y no te a gustado ningún anillo! - el alfa negó sin mirarlo.
- papi tengo hambre... - exclamó la pequeña ojinuez mirando a su padre.
- también yo... Que habrán hecho de comer YeoSang y HongJoong, ya hasta lo estoy saboreando! - dijo casi babeando, San suspiro algo molesto se levantó de la banca tomo la manita de su hija para ir a la última joyería.
- anda SeongHwa...
- ¡Ya voy!
Dijo sin ánimos y cansado, al entrar notaron que esa tienda estaba casi vacía y solo había personas bien vestidas, cosa que San y SeongHwa en ese momento no iba vestidos así si no casualmente el ojigris con pantalónes de mezclilla y una camisa de botones y zapatos, el ojinuez igual unos pantalones mezclilla y una camisa blanca de botones arremangada hasta los codos y zapatos. Las personas que estaban en el establecimiento los miraban raro y con disgusto, el pelinegro le dio igual y se acercó al mostrador viendo los anillos que había ahí.
