☾ ✭ Fantasias ✭☽

˚⁠˳confusione˚⁠˳

- Ran... tú-...

- Naho...yo, ah....vaya, no, es decir...yo no...es decir...-.

- Ran, yo entiendo! Lo entiendo, entiendo que me quieras dejar y no volver a hablar! Perdón! Perdón por no decírtelo antes! Pero tengo miedo! Yo! No sé lo digas a nadie Ran, porfavor! Si alguien que...que no sea de  confianza se entera me podrían...me alejaría de ti! Y de mi hermano! Yo lo quiero eso! Porfavor, perdón, te quiero mucho Ran! Me has hecho apreciar el mundo humano! No quiero que lo hagas! Pero lo entenderé, entenderé que no quieras estar conmigo porque soy un monstruo a tus ojos- las lágrimas rebasan mis ojos y comienzan a salir, mis palabras salen sin coherencia y solo solllozo, en mi reverencia solo veo los pies de Ran, el cual está apretando los dedos en sus chanclas...siendo un frío especial en mi cuerpo y mi corazón siente algo que no viene siendo posible describir, el miedo de que me deje crece...haciendome temblar y llorar más...y pensar que me burlaba de mi hermano por llorar con sus libros romanticos.
Dejo de ver los pies de Ran y supongo que se ha ido...dejo de hacer una reverencia pero sigo viendo al suelo...sabía que esto podía pasar y no me prepare nunca..yo, quiero creer en él, sé que no lo dirá a nadie, pero...

- Todo bien Rindō?-.

- ah? Claro, es solo que mi hermano no contesta el teléfono-.

- Hmm, talvez está jugando con los delfines- levanto los hombros y Rindō ríe- Tú y tu hermano tienen maneras de hablar raras, pero siempre sacan una sonrisa...tienes razón, debe de estar jugando con Nahoya por ahí-.

Sonrió y veo mis pies en la silla de ruedas, volteo a ver a Rin y dudo mucho lo que voy a pedir- Crees que me puedas ayudar?- Rindō me ve, y hace una cara de confusión, se acerca a mi- Claro Sou, en qué?- Me arrepiento un poco y me hago para atras en la misma silla, me encojo algo y hablo bajo, por lo cual Rindō me pide repetirlo- Crees que me puedas ayudar a ponerme de pie? Yo...ah...quisiera intentar caminar una vez más-.

- ah? eh? Puedes? Es seguro? Claro que puedo ayudarte-.

- Ah, yo, puedo... sí, es..lo he estado intentando con Hakkai, pero no hemos logrado mucho..-.

- Ah, claro, te ayudaré, ven aquí, yo ah, te tomo por la cintura un momento, solo para más firmeza, bien?- se inclina hacia mi, tomando una de mis manos y rodeando mi cintura con su brazo derecho.

- Oh dios...- Me remuevo, rojo como tomate, encima de Rin, después de muchas horas de intentar caminar solo con Rin, solo logré dar dos pasos, luego, caí sobre el y ahora yo...

- Oh dios- repite Rindō viéndome a los ojos- Estás bien?- y una carcajada sincera de Rindō sale...me hace sentir bien, y yo dejo de estar tan nervioso como lo estaba mientras lo sigo en la risa.

- Yo! Ay... sí, estoy bien, tú?-.

- Claro que estoy bien Sou, no pesas mucho y estás chiquito-.

- ah? Cómo que chiquito? Soy de una altura promedio-.

- Sip, promedio para un Minion- Ríe y yo volteo la cabeza, confundido, el deja de reír y me ve asustado- Tu tampoco has visto los Minions verdad? Dios! Qué les pasa a ti y a tu hermano!- se levanta y me toma de las axilas, levantandonme con facilidad- iremos a verla ahora, en mi habitación tengo las películas en DvD- Habla Rindō, me tiene en brazos y sube las escaleras, yo me abrazo fuerte a él.

Ya en su habitación me deja en la cama y yo sigo confundido.

- Mira! Aquí tengo la uno, te vas a divertir Sou con esta Sou-.

- Qué es?-.

- una película muy buena, tus hermanos gemelos están ahí-.

- Mis qué?-

- tus compañeros de estatura-.

- Gente promedio?-.

- sim-.

Rindo se acuesta a mi lado mientras pone la película, toma su teléfono y escribe algo, luego me ve con una sonrisa- Me da gusto que estés agarrando más fuerza en las piernas, yo mismo me encargaré de que tengan la suficiente para que podamos caminar por la orilla del mar juntos de una vez por todas-.