🌻19. Busan🌻

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—Oh —exclamó, viendo las maletas fuera y dentro del coche―. Vuelvo a Busan.

Jaehyun dejó de sonreír y su mente se quedó en blanco.

«¿que?»




[....]




《Jaehyun》

—¿Por qué? —Exclamó Jaehyun—. No puedes —dijo. Estaba triste, enojado y confundido.

Yuta no podía irse. No. Él tenía que quedarse, en Seúl. Terminar sus estudios, después casarse, adoptar dos niños, tener una mansión, un lindo auto y 101 dálmatas.

Con Jaehyun.

Porque Yuta debía estar con Jaehyun.

¿Verdad?

—Déjame explicarte bien... —trató de decir Yuta, pero fue interrumpido por el chico de hoyuelos.

—¿Por qué no me dijiste? —volvió a decir, con expresión triste.

—Jaehyun... —suspiró.

—¡Voy contigo! —dijo.

—¿Qué?

—¡Sí! —volvió a decir—. Yo...eh, ¡yo quepo en esa maleta! —señaló una maleta, que reposaba fuera del auto. Azul.

—No, espera, Jae...

—¡Es que no te puedes ir! ¿Y la escuela?

—Salimos de vacaciones la semana pasada —contestó.

—Yuta...

—Jaehyun... —repitió.

Sin previo aviso, Jaehyun lo abrazó, con fuerza, escondiendo su cabeza en el cuello del japonés.

Yuta le acarició la espalda—. Jae... —se detuvo—. ¿¡Jaehyun, estás llorando!?

Jaehyun lo apretó más.

—Jaehyun, no llores —Yuta no sabía qué hacer. Nunca supo qué hacer exactamente cuando alguien lloraba—. Joder, Jaehyun, ¡es sólo por una semana!

Jaehyun abrió los ojos, se separó de Yuta, aun sosteniéndolo por los hombros. Tenía los ojos aguosos—. ¿Qué dijiste?

Yuta suspiró—. Solo es por una semana —explicó—, mis abuelos viven allá —prosiguió—, mi abuelo está enfermo y mi madre se preocupó. Iremos a verlo solo por una semana —recalcó las últimas palabras—, y, si te dije hasta ahorita, es porque a mí también me dijeron está mañana. Fue como una sorpresa. Lo siento, de todas maneras —finalizó.

Jaehyun volvió a sonreír, aún con sus ojos cristalinos. Abrazó a Yuta de nuevo.

—¿Por qué no mencionaste antes? —susurró en el oído del castaño.

—¡Porque no me dejaste! —contestó.

El coreano rió, avergonzado—. Lo siento —musitó.

—Eres un tonto —dijo, y besó al chico.

No se dieron cuenta, pero atrás de ellos se encontraban las hermanas de Yuta, observando todo.

Momoka y Hiromi reían bajito, Sora solo alzaba las cejas y Haruna tomó varias fotos.

—Éstas las verá la abuela —dijo, viendo las fotografías en su celular.

—¿Estás seguro que sólo será una semana? —preguntó Jae, una vez que se separaron.

Yuta le acarició el pelo (o intentó)—. Sí, Jaehyun. Seguro —contestó—, de todas maneras, si mamá decide quedarse unos días más, te lo diré. Por mensaje o te llamo, no lo sé.

BITTERSWEET ☆Jaeyu☆Where stories live. Discover now