Lost & Found In Oblivion [Traducción]

Capítulo 8: Amanecer, Durar

"¿Lou?"

Harry salió de su habitación, una toalla en sus rizos mojados. Frunció el ceño cuando no vio ninguna señal del omega. ¿Era su imaginación o el aire olía amargo, como si el moho hubiera brotado en las paredes, como si el sol hubiera desaparecido? Notó el tazón de macarrones con queso y algunos trozos de brócoli en la mesa de café. Nada parecía estar fuera de lo común. Louis debe haber ido a su tienda o debe haber ocurrido algo que le hizo irse sin decir una palabra.

Harry se metió en el sofá, metiéndose unos macarrones tibios en la boca antes de empujar la tapa de su portátil. Inmediatamente, apareció un correo electrónico en la pantalla y se tomó un momento para escanear el documento. Sus cejas se arrugaron de confusión mientras pescaba su teléfono del bolsillo de sus pantalones.

"Pleasing Heat House. Soy Bebe, ¿en qué puedo ayudarte?"

"Oye, Bebe, soy Harry. Umm... ¿Puedo preguntarte por qué recibí la lista de preferencias de un cliente cuando ya envié mi renuncia hace una semana? Incluso fui allí para presentarla y todo eso".

Podía oír el teclado que venía del otro extremo del teléfono y esperó pacientemente antes de que Bebe dejara un suspiro suave: "Ahora estoy viendo tu renuncia. Lo siento, Harry, no creo que el sistema se haya actualizado a tiempo, así que por eso alguien te seleccionó. Me aseguraré de ponerme en contacto con el cliente ahora mismo. Es un error, lo siento mucho, de nuevo, por esto".

"No, está bien". Harry respondió con buen carácter. "Solo asegúrate de que el cliente tenga a alguien con quien pueda pasar su celo, ¿vale? Hazle saber que no lo engañé ni nada". Se rió humildemente. "Ya estoy jubilado".

La ligera risa de Bebe le hizo un hoyuelo. "Siento mucho que hayas decidido dejarnos. Y solo hayas hecho ese caso..."

Harry se encogió de hombros, sonriendo al tazón de macarrones. "Algunas cosas se interpusieron en el camino, así que tuve que irme. Es lo mejor". Nunca podría volver a tocar a nadie más, no cuando no fueran Louis, no olieran a sol y vainilla, no sienta amor.

"Algunas cosas, eh". Podía escuchar la sugerción en el tono de Bebe. "Bueno, siempre y cuando seas feliz".

"Lo soy. Muy feliz". Lo confirmó cuando la chica omega tarareaba.

"Tal vez todos podamos salir a tomar una copa en algún momento". Ella dijo mientras él asintió. No había necesidad de que un genio juntara dos y dos. Ella ya debe saberlo todo. Sobre lo enamorado que estaba Harry con un determinado omega.

"Eso sería maravilloso".

Terminó la llamada y terminó de comer el tazón de fideos. Le envió un mensaje de texto a Louis, pero no apareció ningún visto debajo de su texto. Decidió que visitaría el omega por la tarde en la tienda. Por ahora, iba a trabajar en su codificación y terminar algunas tareas para compensar el tiempo perdido durante su celo.

Entró en H.O.M.E. y miró, notando por primera vez al socio comercial de Louis, Liam, situado detrás del mostrador. Caminó hasta el alfa que tenía un lápiz metido detrás de la oreja mientras garabateaba en un cuaderno.

"Oye, amigo". Él saludó. El otro alfa levantó la vista, la cálida sonrisa ya estaba en su lugar.

"¿Necesitas ayuda? ¿Buscas algo en particular?" El alfa preguntó al instante, cerrando su cuaderno y prestando toda su atención a Harry.

No estaba seguro de si debería presentarse o no. No sabía si Louis lo había mencionado antes.

"Um... Estoy buscando a Louis. ¿Pensé que estaba en el turno de tarde y de noche?"