Dos semanas después

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Narra t/n

Dos semanas habían pasado desde que había pasado lo de Jimin.

La entrega de ensayos ya había ocurrido y como se lo prometimos, Jimin y yo hicimos lo posible por ayudar a Joanne con el suyo.

Por su parte, Anne estaba estresada con la preparación de la fiesta de Halloween que ya se aproximaba. Había decidido darnos tareas en grupos para la planeación. Era divertido ver a Suga frustrado de un lado a otro de la ciudad con Gwen pues eran los encargados de la decoración y también era divertido ver a Taehyung quejarse todo el día de tener que participar en lo que él llamaba "una pérdida de tiempo".

Él y yo habíamos salido constantemente al cine, exposiciones de arte, la feria y otras actividades triviales. Disfrutaba mucho de su compañía y sobretodo de sus besos y momentos de perversidad, sin embargo no habíamos tenido oportunidad de continuar con lo que habíamos dejado en casa de Jungkook.

Joanne se la pasaba de compras para su nueva etapa como chica inglesa. El pobre Jimin era el que la acompañaba y cargaba sus bolsas mientras que Jungkook continuaba saliendo con otras chicas.

-¿Cuánto? -Volvió a preguntar Taehyung.

-10 dólares -repitió la señora de la tienda en la que nos encontrábamos.

Taehyung se volteó hacia mi con la bolsa de gomitas en forma de ojos humanos.

-¿10 dólares por esto? -Se quejó-. T/n quedaremos en banca rota.

-Qué dramático eres -Dije arrebatándole la bolsa de las manos para acercarme a la señora-. Discúlpelo por favor.

La señora rodó los ojos mientras yo le dedicaba una sonrisa apenada.

-Si llevan más de 5 se los dejo en 8.

-Perfecto, llevaremos 10.

Una vez compramos la mercancía, salimos de la tienda.

-Todas esas cosas de Halloween son muy caras -Se quejó Taehyung-. ¿No podemos dar snacks normales?

-Deja de quejarte -Le dije divertida-. Solo son los dulces, después podemos comprar cosas normales como gelatina, pan, salchichas, fruta y yo le puedo pedir de favor a Pablo para que haga los snacks decorados.

-Cierto, tu hermano es chef -Dijo alegre- De acuerdo t/n, me has salvado.

Reí ligeramente.

-Muy bien, ahora hay que ir a checar nuestros disfraces.

-¿Podemos comer primero?

-Está bien.

Narra Taehyung

Los días habían pasado y a pesar de que aún no había conseguido que mi madre regresara a Londres, Gwen había sido de gran ayuda para apaciguarla.

Había tenido la oportunidad de salir con t/n y conocerla más solo para darme cuenta de que era probablemente la mejor compañía del mundo.

-Estoy satisfecha con los disfraces -Dijo t/n mientras dejábamos las bolsas en la parte trasera de mi auto.

-Odio mi disfraz -puntualicé haciéndola reír-. Me las vas a tener que pagar.

Cerré la puerta del auto y la tomé ligeramente del brazo para atraerla a mí y darle un beso que me correspondió.

-Vámonos antes de que me engatuses porque hoy me toca hacer la cena en mi casa.

Asentí y después de darle otro beso corto y le abrí la puerta del copiloto para irnos.

La dejé en su casa y seguidamente fui a mi departamento. Al subir al ascensor tomé mi celular y me di cuenta de que tenía varias llamadas perdidas de Gwen.

Abrí su chat a medida que salía del ascensor y le mande un mensaje preguntándole qué necesitaba. Justo estaba escribiéndome de vuelta cuando saqué mis llaves para abrir la puerta.

-Vaya -Dijo mi madre-. Hasta que llegas.

Di un pequeño salto del susto pues no esperaba a nadie dentro.

-Demonios mamá, ¿Cómo entraste? -Me quejé cerrando la puerta detrás mío.

Ella se encontraba sentada en la mesa.

-Como toda propiedad bajo mi nombre, tengo una copia de las llaves -Contestó-. Siéntate, necesito hablar contigo.

La miré extrañado.

-Ahora, Taehyung -Ordenó alzando un poco la voz.

Hice caso y me senté frente a ella.

-¿Qué pasó ahora? -Cuestioné.

-Me pregunto lo mismo -Contestó con seriedad-. ¿Hace cuánto tiempo que tu y Gwen no son novios?

-Pero...

-Y no me mientas a la cara Taehyung.

Suspiré.

-Hace unos... tres meses.

-¿Y luego?

-¿Y luego qué?

-¿Cuándo pensabas decirme?

-No pensaba decirte -Contesté-. No quería que precisamente me vinieras a fastidiar.

-Ya hablé con Gwen -Informó-. Y parece que lo que hiciste no tiene reparación.

-No hice nada, simplemente ya no quería ser su novio.

-Eres muy estúpido.

Miré hacia abajo.

-Tendré que conseguir a alguien más, me harás tener que trabajar el doble.

-Mamá, no quiero a alguien más -Le dije mirándola de nuevo.

-No te estoy preguntando si quieres, Kim Taehyung. Es tu obligación con tu familia, o ¿Qué?, ¿Planeas casarte con esa niña estúpida de la universidad?

-¿De qué hablas?

-Esa tal t/n, no creas que no sé que has estado saliendo con ella. Es por eso que me di cuenta de que me estabas engañando.

-No es estúpida mamá, es la mejor de la carrera, tiene un futuro brillante.

-Sus papás tienen que trabajar día y noche para pagarle esa carrera. Si bien no son unos muertos de hambre, no veo nada brillante en sus cuentas bancarias. Ambos trabajan para alguien más.

-Madre. Primero que nada ni siquiera estoy pensando en casarme con nadie, simplemente quiero estar con la persona que quiera ya sea una semana, un mes, toda la vida pero con quien quiera, ¿Entiendes?

Mi madre suspiró frustrada. Podía notar en las venas de su blanco cuello que estaba conteniendo su enojo.

-¿Hiciste el ensayo que te dije? -Preguntó tranquilizándose.

-Sí, sí lo entregué.

-Bien, pues cuando estés en Londres solucionamos este problema.

Taking over you |Taehyung y tú|Where stories live. Discover now