BUSCÁNDOTE {ShinKami}

CAPÍTULO 31: DE NUEVO

Domingo, 20 de enero, 12:01pm:

Kaminari está despierto, sentado en la cama del hospital. Tiene mareos, apenas tiene apetito y le duele todo el cuerpo. Además tiene vendas y esparadrapos tapando incontables cortes y quemaduras. Está destemplado, no ha conseguido entrar en calor todavía.

Abre y cierra el puño, despacio. Se siente débil, había perdido mucha sangre y además lo poco que ha comido los últimos días lo ha debilitado. Aún le duele la garganta por los gritos y le pican los ojos de lo mucho que ha llorado allí dentro.

Entre otras, sigue aterrorizado por lo que le han hecho. Experiencias así no se pasan tan fácilmente. Sin embargo, ahora está bien, sano y salvo, gracias a una persona.

La puerta del cuarto se abre para que Shinso, Kirishima, Bakugou y el resto que vinieron a rescatarlo puedan entrar. Kirishima es el primero en hablar.

-¡Kaminari, ya estás despierto!- Exclama con un aire sorprendido.

-¡Chicos! ¡Qué bien veros otra vez! Os echaba de menos.- Dice Denki entusiasmado, justo antes de abrazarlos a todos que se han acercado para eso. -He sabido que fuisteis vosotros quienes me encontrasteis. Muchas gracias, de verdad.

-Faltaría más, después de todo lo que has tenido que pasar.- Habla Momo, que había estado también preocupada por él cuando se enteró.

-Por desgracia los villanos huyeron, así que no pudimos darles lo que se merecen.- Deplora Tokoyami.

-Bueno, lo importante es que estés bien así que dinos, ¿Cómo te encuentras?- Pregunta Jiro con una sonrisa que desprende optimismo.

-Prácticamente como nuevo, comparado con cómo estaba allí…- Se pone a recordar Denki. -... y me pica la venda de la cabeza.

Dicho esto, se oyen algunas carcajadas. Ese es el Kaminari que conocían todos, el Kaminari que Shinso echaba de menos. Por suerte, esta vez no ha tenido que esperar días para recuperar esa sonrisa que tanto adora.

-De nuevo en el hospital, ¿eh? Ya te vale Kaminari, que estamos a 20 de enero y ya van dos veces este año.- Vacila Jiro.

Denki no hace nada más que sonreír ampliamente, feliz de poder hablar con todos otra vez y de comprobar que sí que les importa. Cuando pensaba que no los volvería a ver, le demuestran lo que harían por él.

Viendo que les quedan unos minutos de visita, deciden ponerlo al día sobre la UA, mientras que Denki cuenta las torturas que tuvo que aguantar, algunas producto de miradas de terror en algunas caras. Parece que no es el único que se pondría histérico en su situación.

Mañana le dan el alta a Kaminari, así que no merece mucho la pena estar tanto tiempo. Así pues, sus compañeros empiezan a salir, despidiéndose según desaparecen por la puerta. Pero Denki quiere que uno se quede.

-Shinso, ¿Puedes esperar un segundo?- Kaminari lo llama. Shinso se gira y da un paso hacia adentro puesto que ya estaba prácticamente en el pasillo. Los demás optan por seguir su camino e irse.

-¿Qué ocurre?

-Sé que fuiste tú quien se dio cuenta de que no era yo en realidad.- Denki no sabe muy bien qué decir. Quiere hablar con él, estar con él ya que ha sido en él en quien no ha podido parar de pensar en todo este tiempo. Su salvación, la razón por la que no ha perdido la cabeza.

-Ah, sí…- Hitoshi afirma algo tímido, rascándose la nuca. No pretende llevarse todo el mérito.

Se quedan un poco en silencio. Después de todo por lo que han pasado… Se gustan, pero ambos creen que no pueden estar con el otro por diferentes razones. Es por eso que la comunicación es algo difícil e incómoda.