Capítulo 07.

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*Narra Apo*

Su día de descanso había sido ayer, y había sido tan común como siempre; ir a nadar, comer viendo alguna serie u película y luego cenar junto a su hermano mientras lo escuchaba hablar sobre las cosas que iba conociendo en la universidad.

Pero ese día había terminado, y ahora él se encontraba en aquella barra creando licores y impartiéndolos a los clientes.

Hoy tenía que bailar, eso le gustaba. Se dispuso a despedirse amablemente de la chica que acababa de atender y se encaminó a el camerino, allí le esperaba el encargado de su vestuario y de igualmente la chica de su maquillaje.

Mientras caminaba por el pasillo al camerino miró su celular, eran las nueve y cincuenta minutos de la noche.

¿Por qué no a venido Mile...? —esté de pregunto a sí mismo en voz baja —¿por qué estoy pensando en él? —se cuestionó en sus pensamientos.

¡Apo! —Dyna, la chica que le maquillaba grito detrás de él.

Dime —esté se dio la vuelta desorientado.

¿Te pasa algo...? —la rizada lo noto distraído.

Nada, nada —negó tener alguna cosa —solo estaba pensando en algo.

Bueno, bueno —está empujaba suavemente a Apo —vamos que llegas tarde.

Ok, ok —esté no dio resistencia y camino.

Al llegar al camerino vio allí a la chica que seguía después de él. Hoy, a diferencia de las tantas otras veces que había actuado a través de los últimos años; iba a ir en la entrada del espectáculo.

Buenas...noches; Apo —aquella joven de apenas diecinueve años saludó.

Ella era Hanna, y era nueva en aquel lugar. Cabello largo, liso y negro hasta la cintura, ojos marrones grandes, pechos deseosos, cintura reducida y muy buen trasero; su tez era blanca casi como la leche y sus labios gruesos y rosas naturalmente.

Buenas...noches —dio respuesta y se acomodó en frente al espejo donde habitualmente se arreglaba.

Después de eso Dyna comenzó a limpiar y maquillar la piel morena de Apo, mientras que entre ellos hablaban de diversos temas; sin embargo al que preparaban no le habían escuchado decir mucho.

Después de un rato terminaron el maquillaje, Apo se colocó su traje, esta noche, igual que las últimas veces, un pantalón de cuero de color negro, una camisa blanca al fondo y unas ligas color rojo por encima de su fornido cuerpo.

Apo media 1.81, era muy posible que pasara al por ciento de hombres común en estatura de Estados Unidos, por otro lado en Tailandia aquello era lo más normal. Pero a parte de su gran estatura también estaba su cuerpo bien trabajando; ya fuera por la natación constante, su trabajo bailando polidans u sus actividades comunes del día a día, Apo debía y tenía una muy excitante y divina anatomía.

La música de fondo comenzó,  Nattan llego al escenario, sus movimientos se comenzaron de dejar salir. El bar estaba tan lleno como siempre, las voces, gritos y silbidos se escuchaban por sobre la música; Era la bienvenida de siempre hacia Nattan.

El chico del bar [MileApo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora