Cap. 0 - La presentación

527 49 3
                                    

Narrador omnisciente.

La puerta de aquella casa de gran tamaño, se había abierto. Y por esa puerta estaba entrando una hermosa mujer de cuerpo curveado perfecto y grandes atributos, delanteros y traseros, sus cabellos ondulados y de tinte pelirrojo caían hasta su espalda, detrás de ella, cinco chicos de la misma edad, diferente lugar de procedencia.

- Este, es el recibidor, o lobby, como quieran llamarlo - comentó volteando a ver a los chicos, quienes miraban con asombro el lugar, y que observaban con fascinación desde que vieron la casa en su fachada - veo que les gusta, y eso me llena de emoción, estarán muy cómodos aquí.

La mujer hizo un ademán para que la siguieran hasta la siguiente habitación.

- Esta es la sala - comentó - pueden tomar asiento - dijo y los chicos asintieron sentándose en los sofás que se encontraban ahí - la casa cuenta con seis habitaciones, de las cuales ustedes podrán elegir, todas con maravillosa vista a los alrededores, cabe mencionar que la casa más cercana a este sitio está a veinte kilómetros, entonces pueden divertirse a lo grande.

- Genial - comentó con travesura en su voz, uno de los chicos cuyos ojos eran color verde.

- Claro que es genial - afirmó la mujer - la casa cuenta con su cocina, cuarto de cine, terraza con un mini bar, gimnasio, áreas verdes en la parte trasera y una zona de alberca dentro de la propiedad además claro de cinco habitaciones cuyo acceso es restringido para ustedes durante los primeros días - terminó viendo la fascinación de aquellos hombres frente a ella.

- ¿Por qué están restringidas? - preguntó con curiosidad un chico de flequillo.

- Son para actividades específicas, que de acuerdo a las dinámicas las podrán utilizar más adelante, en esta casa se realizan varias filmaciones del cine de la pornografía gay por eso su gran variedad de cuartos - comentó la mujer, tratando de responder a la duda del chico. - ahora vamos con las presentaciones. Como ustedes ya saben, mi nombre es Amanda Sandoval, me verán una vez al día en esta casa, les traeré juegos, comida, lo que necesiten lo traeré, ahora ustedes, nombre, edad y lo que deseen agregar, ¿Cuál es su pasatiempo favorito?

El chico más cercano a su derecha se puso de pie e hizo una pequeña sonrisa tímida hacia los demás - Richard Camacho, veinticuatro años, aspirante a policía, mi padre es el comisario general en el cuerpo policiaco, mi pasatiempo es el tiro deportivo, pasión que me inculcó mi padre, me dejó disparar mi primera arma a los catorce y desde entonces solo he perfeccionado la técnica. Se disparar armas de fuego pequeñas o rifles de bajo calibre, así también aquellas de aire comprimido.

- Muchas gracias, Richard, muy interesante - agradeció la mujer y miró al siguiente chico que se puso de pie al instante.

- Bueno, mi nombre es Joel Pimentel, veinticuatro años, soy mecánico por naturaleza, no estudie ninguna carrera, no lo creí necesario, mi padre me da todo lo que necesito, tengo cinco hermanos, bueno, medios hermanos, que les digo, en mi familia tenemos una debilidad por la mujeres, y pues mi padre nos dio una madre a cada uno, es espectacular. ¿Qué más? ¡Ah, sí! Amo la restauración de autos clásicos. Y soy campeón estatal del tiro con arco, creo que eso es todo.

- Si - contesto la mujer con una mueca - gracias, Joel.

- De nada preciosa - respondió con un guiño y una sonrisa traviesa.

Ella solo asintió y miró al siguiente.

- Zabdiel de Jesús, es un gusto - se presentó el chico - veinticuatro años, soy mesero en uno de los restaurantes más famosos de New York, soy bastante hábil para la degustación de vinos, esto claro, gracias a mis diferentes acompañantes que he tenido, tengo un gusto por las mujeres maduras, ¿Qué les puedo decir? Es mi debilidad - comentó con una sonrisa de oreja a oreja - soy fanático del paintball que para aquellos que no lo conocen - miró a Joel - prácticamente disparar pintura, algo doloroso, pero te acostumbras - levantó la playera en su costado y mostró el gran moretón.

- ¡Vaya que increíble! - Dijo la mujer asombrada - que interesante Zabdiel - expresó la chica para después mirar al chico de un lado.

- Erick - los saludo con dos dedos cerrados, y una mueca divertida - Erick Brian Colón.

- Ups, escuché su nombre y de repente siento que me hace falta algo de mi cartería - comentó Pimentel finalizando con una risa burlona.

Erick sonrió mostrando desinterés, pero de igual manera ganas de responder a ese comentario - tengo veintitrés años, amante de los juegos de mesa, desde ajedrez, que para los que no lo sepan, porque seguramente solo han de jugar con tuercas y tornillos engrasados de un taller - contestó indirectamente burlándose de Joel, a lo que el otro borró su sonrisa - como decía el ajedrez es un interesante juego de estrategia, se jugar billar, póker y soy traceur, no te preocupes Joel, lo que no entiendas te lo explicaré al final - rio levemente - así nos llaman a quienes practicamos parkour que es más que nada una actividad física de destreza que nos permite trasladarnos de un lugar a otro con facilidad. Mi padre es dueño de un gimnasio de deportes de contacto como kick boxing, karate, boxeo, jiu-jitsu, yo soy entrenador de kick boxing y es todo. - finalizo, sentándose con una sonrisa de victoria en sus labios.

- Que interesante, Erick - contestó Amanda.

- SI, Erick, que interesante - bufó Joel.

- Por ultimo tu - contestó Amanda mirando al chico restante.

- ¿Qué tal amigo? Es realmente un gusto conocerlos. Yo me llamo Christopher Vélez, Chris para los amigos ¿eh? ­- miró a Erick quien solo sonrió. - Ok - dijo menos entusiasta - tengo veinticinco años, soy skater, el mejor de la ciudad, siendo un poco modesto, tengo una habilidad con los instrumentos musicales, en especial la guitarra, debido a mi trabajo, que no lo mencioné, soy inspector de calidad en una empresa automotriz, gracias a eso tengo una percepción muy desarrollada en cuanto a los colores, por ejemplo - señaló a la mujer - tu vestido para los simples ojos es de color azul cian, pero obviamente si observas bien, es un tono de cerúleo.

El chico tomó asiento, sin recibir respuesta de Amanda quien lo observó por unos segundos - asombroso, Christopher. Bueno - suspiró - ahora que nos conocemos todos, les diré las reglas del juego - se puso de pie y los miró a todos de reojo - como ya saben, este es un experimento patrocinado por una de las grandes productoras del cine para adultos gay, fueron seleccionados de acuerdo a sus personalidades, como chicos naturalmente apuestos y heterosexuales con fama de mujeriegos - miró de reojo a Zabdiel y Joel - queremos saber que tanto se puede doblegar su sexualidad antes de romperse y caer en la tentación. Las reglas están diseñadas para que el contacto entre ustedes sea un poco más dinámico y poco rutinario, ¿creen poder soportar eso sin caer en la tentación?

- Por supuesto - rio Joel, quien después lo acompañó en su risa, el joven Zabdiel.

- Lo veremos - sonrió la chica, recogiendo su cabello - primera regla, en punto de las seis de la tarde, nadie dentro de esta casa deberá estar vestido, la desnudez reinará por las noches - mordió su labio imaginando esa escena con algunos de los chicos - segunda regla, todas las habitaciones cuentan con su propio baño, lamentablemente este se encontrará cerrado durante su estadía en la casa, el único baño habilitado es el principal, el cual solo tendrá servicio de agua de 12:00 pm a 12:20 pm y de 20:00 pm a 20:20 pm. - Amanda sabía que reacción y expresiones tenían estos chicos, pero aún así levantó la mirada para verlas por ella misma - tercera y última regla, el acceso al área de alberca es única y exclusivamente a chicos desnudos, no se vale entrar con ropa a esa área.

- ¿Cuándo durara este experimento? - preguntó Erick, poco después de que la chica dejara de hablar.

- Ocho semanas, a partir de mañana - respondió de inmediato.

- ¿Podremos invitar chicas a la casa? Ya sabes, para el aburrimiento, o quizá preferirías venir tu - preguntó Joel mirando a la chica de arriba abajo.

- Esa es una excelente pregunta - coincidió Zabdiel.

- Por supuesto que no - contestó de manera obvia mientras reía - si quieres un poco de senos podrás verlo en la variedad de pornografía que dejamos en el cuarto de cine.

La chica tomó su bolso y antes de caminar a la salida los volvió a ver - ¿Alguna otra duda? - al no escuchar respuesta, asintió y volvió a mirarlos - esta noche pásenla bien, conozcan la casa, conózcanse ustedes, lo hará menos tedioso, créanlo. Las reglas se aplicarán a partir de mañana - hizo un pequeño guiño a Richard mordiendo su labio en el proceso y después salió de ahí.

- No está nada mal - bufó el ojiverde al verla caminar.

Intenta no volverte gay // CNCOWhere stories live. Discover now