MY SOULMATE || KOOKMIN

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— Ya para~

Río fuertemente un chico de cabellos castaños mientras se removía en la cama de su mejor amigo de la infancia pero el más alto de los dos no se detuvo por el simple hecho que le gustaba escuchar la risa de su vecino.

— Y-Ya... Kookie~

Jimin sentía que le faltaba el aire de tanto reírse y ahí fue donde el pelinegro recién se detuvo sonriéndole de manera divertida.

¿Como habían llegado a esto?

Pues fue una pelea un tanto infantil de quien de los Avengers era el mejor, Jeon siempre resaltaba las cualidades de Iron Man mientras que Jimin defendía a Hulk y ahí es donde comenzó la batalla de cosquillas, donde el más bajo perdió ante su mejor amigo.

— Como gané entonces concordamos que Iron Man es mejor que Hulk.

Jimin le miró con el ceño fruncido una vez se calmó y le tiro una almohada en el pecho provocando que el pelinegro riera ante la manera infantil que tenía aveces a sus 17 años aquello le daba ese toque de ternura, este llevó sus manos a las mejillas del menor y estiró estas sin hacerle daño.

— Quita esa cara o no te daré tus chocolates favoritos.

Con tan solo mencionar la palabra chocolate hizo que el peli castaño dejara atrás su "enojo" y le dio una de sus hermosas sonrisas al chico de mayor estatura, este soltó sus mejillas y le dio pequeñas caricias para aliviar la presión que hizo ahí.

Sin más el pelinegro se levantó de su cama y fui a buscar en su mochila la bolsa donde estaban los chocolates de Jimin. Una vez la encontró movía la bolsa de manera divertida hacia su mejor amigo haciendo reír a este, le iba a tirar otra almohada pero Jeon se acercó a este y le dejo la bolsa de chocolate en su regazo.

Jimin no dijo nada y se dedicó a comer aquel néctar de dulzura que le daba muchos años de vida mientras tanto Jeon se le quedó mirando en silencio dándose cuenta que su mejor amigo tenía unos hermosos ojos, un hermoso cabello, una nariz de botón tan perfecta, sus mejillas eran muy suaves como si fueran unos mochis y finalmente sus labios gruesos como también carnosos. Por alguna razón quería probarlos y saber a qué sabían esos labios tan cuidados y con aquel rojizo natural.

¿Eh?

Salió de aquel trance a darse cuenta de lo que estaba pensando de su mejor amigo, el siempre vio a Jimin como su hermano menor y al que debía cuidar de todos los peligros de la vida porque literalmente fueron criados juntos a pesar de la diferencia de edad, bueno aunque no era mucho ya que Jeon tenía 19 años.

¿Pero besar a su mejor amigo se sentiría correcto?, ¿como lo tomaría Jimin si se lo dijera? O peor aún si lo ejecutara.

No quería pensarlo así que tomo el control remoto de su Tv y la prendió para ver alguna serie que mantuviera ocupada su mente y alejar aquellos pensamientos extraños.

Jimin era sólo su mejor amigo.