¿Redimirme? ¡Ja! Sí, como no

Capítulo I

Las noticias no dejaron la pantalla de televisión de todos. Incluso si cambiabas de canal, seguía ahí.

En un canal en especial, dos reporteros narraban lo ocurrido desde el lugar de los hechos.

Reportero: Nos acercamos a las 24 horas desde que comenzó el secuestro en el Banco Central de Japón por un grupo de villanos enmascarados. Los héroes ni la policía pueden ingresar ya que tienen francotiradores en el techo y en las ventanas. No se sabe sus quirks, pero es posible que sean no tengan uno debido a que están portando armas de gran calibre.

Reportera: ¡Esperen! Ahora mismo el líder está transmitiendo en vivo sus demandas. Ahí va la transmisión.

La imagen se alteró por unos breve segundos hasta que se enfocó al líder de los villanos en el interior del banco. Detrás de él, un grupo inocente de rehenes civiles y trabajadores en el suelo completamente aterrados.

Líder: ¡Cabezas al suelo o sus cerebros quedarán desparramados! — ordenó a los civiles, que asustados le hicieron caso — ¡Escuchen, héroes! Quiero un vehículo con tanque lleno y sin conductor en 20 minutos en la parte trasera del banco. ¡Sí no realizan mi petición, o me ponen una trampa, mataré a los rehenes uno por uno! ¡Empezando por ella! — exclamó señalando a la cajera en el suelo.

Solo que no había una cajera tendida en el suelo, sino un chico peliverde que estaba boca abajo. Tenía una capucha roja y una cangurera puesto en diagonal en su torso. Sus pies en el aire y sus manos en sus mejillas mientras le daba a la cámara un guiñó coqueto.

Lider: ¡Espera, ¿qué?! ¡¿Quién eres?!

La transmisión en vivo se cortó.

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Cuando el líder del grupo terminó de apagar la cámara, giró su cuerpo y apuntó al chico, que no se inmutó por nada.

¿¿??: Aww, ¿por qué lo apagaste? Pudimos crear un video de estreno sobre mi nueva historia — dijo haciendo un puchero.

Líder: ¿Tu qué?

¿¿??: Oh, ya sé. ¿Por qué no tomas una almohada, te unes a mí y hablamos de chicas hasta quedar dormidos? — preguntó interesado en la idea de una pijamada.

Líder: ¡¿Por qué haría eso?! — preguntó alterado.

¿¿??: En lo general, me gusta más las chicas de cabello y ojos castaños que le guste el mochi. Tal vez algo redonda su rostro y con pegatina de rubor en sus mejillas. Pero… — se levantó del suelo y dio un brinco — Lamentablemente no existe una así.

Líder: ¡¿D-de qué estás hablando?! ¡¿Acaso no sabes qué eres un rehén?! — preguntó retrocediendo un poco asustado, ya que el peliverde se acercaba con una sonrisa, incluso si un arma lo apuntaba no tenía miedo.

¿¿??: ¿Rehén? Por favor. No estoy aquí para ser tu rehén. Más bien, tú eres solo serás la presa de los héroes y de la policía. Mira — dijo señalando hacia la ventana.

Aún estando en guardia, el villano se acercó a la ventana y miró hacia afuera. Había una gran cantidad de policías y comandos especiales, además de algunos héroes esperando atacar.

¿¿??: Como puedes ver, no hay forma de escapar de aquí — dijo poniendo una mano en su hombro — Por ahí está la dragona Ryukyu, la coneja Mirko, la heroína madura +18 Midnight, el Pinocho adulto Kamui Woods, y muchos más héroes que usan mallas ajustadas.

Sin que el villano se diera cuenta, una débil luz verde brilló en la mano que estaba en su hombro.

¿¿??: “Que interesante quirk” — pensó actuando tranquilamente — Imagina cuando un héroe más poderoso que esos inútiles venga… como Endeavor o… All Might.

Líder: ¿A-All Might? — preguntó asustado por la idea de que el Símbolo de la Paz apareciera.

¿¿??: Así que… ¿por qué no dejas tu arma… y tus hombre y tú se entregan a los hombres de azul? — preguntó mientras lentamente tomaba el arma e intentaba quitarla.

Líder: ¡¡NO!! — gritó antes de dispararle al pecho.

*BAM BAM*

Las mujeres gritaron cuando el peliverde fue disparado y cayó muerto al suelo.

Líder: ¡¡CIERREN LA BOCA!! — gritó disparando al aire, obligándolos a callarse — ¡¡MIERDA!! ¡¡TODO ESTO SE ME SALIÓ DE CONTROL!!

¿¿??: ¿Y me lo dices a mí?

Los ojos del villano se abrieron cuando escuchó la voz del peliverde por detrás. Al darse la vuelta rápido, disparó su arma para matarlo. Pero cuando las balas atravesaron al chico, desapareció en una débil niebla verde.

Líder: ¿Una ilusión? — se preguntó en voz baja — Espera, ese quirk…

¿¿??: Es tuyo — dijo susurrándole al oído.

Líder: ¡¡EEK!! — gritó saltando lejos de él para apuntarle — ¿C-cómo…

¿¿??: Hombre, esas balas si que duelen — gimió de dolor cuando las balas salieron de su pecho y sus heridas se sanaban, sorprendiendo al villano — Casi iba hacia la luz si es que pudiera morir.

Líder: Tú… ¡usaste mi quirk! — dijo señalando con un dedo tembloroso.

¿¿??: ¡Sí, y fue genial! — dijo mirando su mano que brillaba de verde — Aunque lamentablemente sólo puedo usarlo una vez, ya sea con tocarlo o de desde lejos. No soy tan OP.

Líder: Copias quirks solo una vez… ¡Ah! — sus ojos se abrieron en shock cuando pudo identificar su rostro — ¡Tú eres ese villano psicópata y asesino! ¡Hooded Thief!

¿¿??: Hijo de… — maldijo antes de agarrarlo por la cara y usaba su quirk — ¡Creí que ese horrible nombre se había quedado en el otro fic! ¡Me llamo Deku! ¡¡DEKU!!

La mano que sostenía empezó a brillar de un fuerte verde intenso, mientras el villano gritaba desgarradoramente, intentando safarze del agarre.

Los rehenes asustados veían impotentes cuando vieron como Deku le estaba drenando la vida.

Afuera, en el tejado del banco, los cómplices empezaron a desaparecer, lo que resultó ser que eran ilusiones para creer que había un ejército de villanos adentro.

Para cuando se dieron cuenta y estaban a punto de entrar, las puertas se abrieron y los rehenes salieron asustados. Los héroes rápidamente entraron al banco mientras la policía resguardaba a los civiles.

Al único que encontraron dentro era al supuesto líder tirado en el suelo. Tenía la mirada perdida y soltando algunos balbuceos incoherentes, como si hubiera pasado por un fuerte evento traumático.

Ahora los héroes se estaban preguntando, ¿quién lo detuvo y lo dejó así de dañado?

Mientras tanto, afuera, un anciano se iba sigilosamente de la escena hasta meterse a un callejón. Apareciendo una sonrisa en su rostro, la ilusión desapareció, revelando ser el villano más joven de Japón, Deku.

Deku: Je, muchas gracias por el quirk. Te debo una — dijo antes de desaparecer en la oscuridad.

CONTINUARÁ