Capítulo III

2K 243 90
                                    

La prisión de máxima seguridad, Tartarus, un lugar donde los villanos psicópatas, lo peor de lo peor, son encerrados ahí. Usando collares supresores de quirk metálicos en sus cuellos y camisas de fuerza para imposibilitar sus movimientos en los brazos, los prisioneros.

Midoriya: ¡Alcaide Galloway, amigo! - sonrió mientras los policías lo llevaban adentro y le presentaba al que dirige la prisión - Me alegra verte otra vez. ¿Qué dice la esposa y los niños? ¿Les gustaron las galletas de naranja que les envié?

Galloway: Midoriya - gruñó con una mueca de odio puro hacia él - Es la quinta vez que vuelves aquí. ¿Qué es lo que sucede contigo?

Midoriya: ¿Qué te puedo decir? - preguntó encogiéndose de hombros - Me gusta el trato al cliente de aquí.

Galloway: Regístrenlo - ordenó a los guardias, quienes asintiendo, buscaron en sus bolsillos y en los tobillos.

Midoriya: ¿Ves? Incluso cargarán mi equipaje sin siquiera pedirlo.

Tras varios minutos de sacar cuchillos de varios lugares del cuerpo del peliverde, registraron su cangurera. ¿Cómo metió todo eso dentro? Es un misterio.

Guardia1: Gafas de sol, pato de goma - nombró lo que sacó de la cangurera.

Guardia2: Timbre de bicicleta - dijo haciéndolo sonar.

Guardia1: Peces gelatinosos - dijo arrojando al juguete al suelo para luego volver a meter la mano - ¡¡AAAHHH!! - sacó la mano, teniendo una ratonera atrapando sus dedos - Ratonera.

Guardia2: Pollo de goma.

El otro guardia sacó un extrañor juguete de goma que hizo chillar.

Guardia1: No sé qué es - dijo sacando unos lentes extraños - Gafas de broma.

Midoriya: Nunca en mi vida los había visto - dijo extrañado.

Guardia2: Bazuca - dijo sacando en enorme arma de la cangurera.

Los guardias y el Alcaide miraron a Izuku con ojos juzgones. ¿Dónde consiguió un arma de destrucción y cómo entró en ella?

Midoriya: Tengo permiso para eso - aclaró antes de que el otro guardia sacara un marco de foto.

Guardia1: Fotografía de la esposa de Galloway - dijo antes de que el mencionado le quitara la foto y la viera.

Midoriya: Oh-oh.

La fotografía era de su esposa, que estaba haciendo una pose sexy en lencería negra sobre la cama. Además de eso, tenía un mensaje y un número en ella, que Galloway no dudó en leer.

Galloway: 'Llámame, amor' ¡¡MARGARET!! - gritó antes de lanzarse hacia el peliverde, pero fue detenido por los guardias - ¡Eres un maldito...!

Midoriya: Oye, era broma - dijo levantando sus manos que seguían estando esposadas - Si te fijas mejor en la foto, te darás cuenta que todo fue editado por su servidor. También, el número es de una línea comercial.

Galloway: ¿Es falsa?

Midoriya: Claro que sí. ¿Cómo voy a hacer eso a la madre de tus hijos? - preguntó cruzándose de brazos con indignación - Seré un asesino guapetón, pero nunca sería capaz de hacer NTR. Eso es algo que Wattpad hace, yo no.

Galloway: Sin duda eres un maldito infeliz - dijo más tranquilo mientras se liberaba de los guardias.

Midoriya: Más bien feliz.

¿Redimirme? ¡Ja! Sí, como noDonde viven las historias. Descúbrelo ahora