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La cosa era muy sencilla.

Louis le había mentido a su familia sobre su vida amorosa y ahora esta jodido.

La verdad es que no planeaba mentirles, nunca quiso meterse en todo este problema, pero, obviamente, Zayn tenía que venir y meter sus narices en todo.

— No puedo creer que le dijeras eso a mamá. — musitó el alfa entre dientes. — ¿Ahora que mierda voy a hacer, Zayn?

— Podías decir que no era verdad y ya. — le restó importancia el otro alfa.

— Algo era decirle que encontré un omega recién y algo totalmente diferente es que llevo meses saliendo con un omega, Zayn. — dijo exaltado Louis. — Le dijiste que hasta teníamos planeado vivir juntos, por amor a Dios.

— Hey, eso lo agregaste tú. — lo confrontó Zayn. — Pudiste tirar la mentira en el primer momento, pero la seguiste, no me eches la culpa ahora.

— Es que se escuchaba muy feliz...

Zayn lo miró a los ojos y volvió a alzar los hombros restándole importancia. El ojiazul rodó los ojos y se fue directo a su habitación.

— Cuando termine de ducharme espero no encontrarte en mi casa. — dijo molestó.

Pero es que Zayn tampoco tenía toda la culpa, y eso lo sabía bien.

Mary había llamado como todos los sábados antes de la cena, eran una rutina que tenían desde que Louis se había ido de Doncaster a Londres a estudiar en la universidad, ya más diez años desde eso.

Y sí, Louis era un alfa de casi treinta y un años por cumplir y sin omega.

Pero es que tampoco quería uno.

El agua caliente comenzó a caer y a relajar sus músculos, era el primer sábado que tenía libre desde de casi un mes de estar trabajando.

Él y Zayn eran copropietarios de una cafetería que había empezado como un pequeño establecimiento para honrar a su madre, lo cual Mary había estado super emocionada y agradecida, luego con los años, habían conseguido tanta clientela que tuvieron que abrir más sucursales.

Ya tenían más de quince establecimientos en todo Inglaterra, y establan planeando empezar a abrir más por todo Reino Unido, y ¿quién sabe? Tal vez luego América.

Él estaba feliz con su vida, ¿por qué nadie podía entenderlo?

Era joven, exitoso, guapo, feliz.

No necesitaba un omega.

Y no es que nunca quisiera uno, tal vez en el futuro, pero no era algo que estaba buscando en este preciso momento, no quería.

Y no es porque no será romántico o no quisiera comprometerse, nunca ha sido un alfa promiscuo ni nada por ese estilo, solo no había encontrado a la persona adecuada, y después de tanto tiempo de buscarla, se había dado por vencido, cuando pase, pasará, no quería forzar nada.

Pero ahora, gracias a la gran idea y su la bocota de Zayn, tendría que ingeniárselas.

Terminó de ducharse y se puso una ropa cómoda para pasar su gran esperada noche de sábado en su casa, viendo una película, comiendo comida basura, sí, eso sonaba muy bien.

— ¿Por qué no te has ido todavía? — dijo entrando a su sala y viendo a su amigo tumbado en el sofá. — No quiero verte ahora o te golpearé.

— Como digas. — Zayn se levantó y lo miró de arriba abajo. — ¿Piensas salir así? — preguntó levantando una ceja.

— ¿Salir a dónde? — Louis se tumbó en el sofá.

— ¿Cómo que a dónde? Es el primer sábado en semanas que tenemos libre, vamos a tomar un trago, por eso me he quedado.

Same Old Shh But Something Different - One Shot - Omegaverse L.SWhere stories live. Discover now