Preocupación [Maitake] One-Shot

Preocupación...

— Hay una nueva pandilla llamada Moebius y está empezando a ganar territorio con rapidez por lo que algún día tendremos que enfrentarlos — Mencionó Mikey con tranquilidad con sus ojos cerrados mientras estaba recostado boca arriba con sus dos brazos detrás de su cabeza esta estando sobre las piernas de su novio, Hanagaki Takemichi, este con una de sus manos acariciando y peinando suavemente el cabello de su pareja y la otra sosteniendo su teléfono.

Al escuchar lo dicho por su pareja su vista se despegó rápidamente del dispositivo para luego proceder a apagarlo y dejarlo a un costado suyo para ahora dirigir su mirada hacia su novio.

— ¿No será muy peligroso, cierto Manjiro? — El rubio lo miraba con intriga y un poco de inquietud, bajando un poco su cabeza para poder observar y estar más cerca del rostro del cenizo mientras su aroma se hacía un poco más fuerte, pero muy levemente.

— No lo será, así que no te preocupes demasiado — Contestó mientras abría lentamente sus ojos, levantaba un poco su cabeza para unir solo por unos breves momentos sus labios con los de el otro chico y expandía un poco más su aroma para poder así que el omega se tranquilizara, su olfato era agudo por lo que podía detectar con más facilidad a lo común el leve cambio en el aroma de Takemichi.

Takemichi guardo silencio y cerró por unos breves segundos sus ojos para disfrutar debidamente el pequeño beso que le estaba propinando su novio mientras el olor relajado de su alfa entraba por sus fosas nasales. No podría nunca negarse a los labios ni al olor de su contrario.

Cuando se separaron ambos abrieron sus ojos, el de iris azules permitió relajarse y disipar todas sus inquietudes con respecto a la pelea que hace pocos segundos su novio le había mencionado, por lo que solamente le sonrió a Mikey. Confiaba en su novio, si él le decía que estaba bien, confiaba en que plenamente así sería.

— Además tienes al alfa más fuerte de todos, ten un poco de fé en mi Mitchy — Le guiño un ojo mientras le regalaba una sonrisa egocéntrica y llena de seguridad. El mencionado solo soltó una pequeña risa mientras sus mejillas tomaban un poco de color y su aroma volví a endulzarse cómo lo era normalmente. Su pareja siempre había sido egocéntrico, seguro de si mismo y coqueto con el desde que se conocieron.

Nunca perdía la oportunidad de presumir que él era su alfa, el más fuerte de todos.

— Claro que si, mi alfa es el mejor — Le dió la razón con una sonrisa mientras inclinaba su cabeza para comenzar un nuevo beso un poco más duradero que el cenizo aceptó con total gusto mientras sus aromas se mezclaban de a poco volviendo más íntimo y hogareño el momento.