Parte 1

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—Mhn~ me duele~ —jadeó el pelirrojo sosteniendo una bandeja en manos, su vista se fijaba en el café que le estaba llevando a su jefe, ayer había hecho ejercicio y su cuerpo estaba adolorido, no podía caminar correctamente—Disculpe, co-con permiso —esquivó a otros empleados evitando que se chocaran con él, la taza aún seguía limpia, no se había caído ninguna gota.

[...]

—¡No estoy para tus cosas en este momento! —gritó el alfa por su celular, su esposo que al igual que él era de categoría alfa, empezó a insultarlo por levantarle la voz; Brasil soltó un suspiro para colocar el aparato al lado suyo, dejando al albiceleste hablar y gritar solo.

—Buenos días, jefe —saludó entrando a la oficina del mayor, este mismo se desplomó sobre su silla para empezar a sobarse su entre ceja, Perú dejó el café en el escritorio del peliverde para poder retirarse, pero su jefe lo había sujetado de la muñeca —¿Necesita algo más? —preguntó un tanto confundido.

Con su mano libre señaló su regazo, el otro no entendió.
Chasqueó su lengua enojado para jalarlo y sentarlo en sus piernas, el omega estaba nervioso e incómodo quería levantarse pero el brasileño se lo negaba —No te muevas —gruñó apegando su cabeza al hombro del peruano.

Je-Jefe ¿E-Está bien? —preguntó dejándose abrazar al saber que no podría liberarse del agarre.

—Solo quedémonos así un momento.

—¡Brasil! ¡Hijo de la re mil puta, más vale que me estés escuchando pelotudo de mierda, ya vas a ver cuando regrese de mi viaje, te reventaré la cara a piñas pedazo de idiota mal nacido de la recalcada concha de tu madre! —el albiceleste finalizó la llamada preocupando al bicolor rojiblanco, rápidamente se levantó y fue a la puerta de la oficina.

—Que tenga lindo día —dijo antes de cerrar la puerta —Ay, el señor Argentina se escuchaba muy molesto... espero que no llegue a mayores —susurró para poder ir a su sitio, comenzó atendiendo las llamadas de los socios de la empresa, luego llamó a su pareja para preguntarle si ya había desayunado, duchado, y alistado —corazón por favor, no puedo salir de mi trabajo para llevarte tu almuerzo, dejé un poco de chaufa en la refri ¿Caliéntatelo, si?

—Está bien... Palomita ¿Cuándo estarás libre?

—Bueno, en unos días llegarán algunos socios importantes y, en un mes podré tener mi descanso de 2 días.

—Iré a recogerte y nos iremos a comer algo rico, nada de peros y excusas, hace tiempo que no hacemos algo juntos.

—Lo sé Chilito de mi vida, y créeme que me gustaría estar contigo ahora mismo.

—No parece —susurró molesto —Palomita te dejo, se me va a ir el bus si no me apresuro.

—Okay, cuídate mi corazoncito de melón ¿Chi? —habló cariñosamente causando un sonrojo y risa en el tricolor.


*🌿 *


➤Pobre Chilito, será cachudo 😿


𝑱𝒂𝒎𝒂𝒔 𝒅𝒆𝒃𝒊 𝒂𝒄𝒆𝒑𝒕𝒂𝒓 [𝑶𝒎𝒆𝒈𝒂𝒗𝒆𝒓𝒔𝒆 - 🇧🇷 𝒙 🇵🇪 𝒙 🇦🇷]Where stories live. Discover now