El diario de Shinji y Asuka

Shinji

El diario de Shinji y Asuka (7)

Estabas bastante hermosa cuando te vi en el ensayo teatral, yo no podía dejar de mirarte mientras que mi corazón no dejaba de latir con rapidez.
A pesar de mantener una conversación fluida, en los ensayos era mas difícil. Tu no dejabas de mirarme a los ojos invadiendome en ese mar azul tuyo, que me encanta.
Si pudiera decir algún color en especial, el azul es mi favorito porque encaja bastante bien con tus ojos. Ahora estamos sobre el escenario vacío, no había nadie cerca por lo que siempre aprovechaba para querer practicar.
Tu parecías muy segura de ti misma cuando me mostrabas tu ensayo, era como si ya no estuvieras tan nerviosa como antes. Y yo no pude evitar sonrojarme por esto, Asuka es bastante atractiva cuando se trata de actuar.
Con su carisma de seguro logrará convencer a los demás de su trabajo, no puedo creer que todavía siga aquí sin hacer nada.
Me invitaste a que ensayara contigo, y no puede evitar acceder ante tu petición. Tome tu mano tratando de ser caballeroso como mi personaje, pero tu notaste mi inseguridad.
No se como lo hiciste pero ahora me mirabas como si estuviera nervioso de mi mismo, me dijiste que cerrara los ojos por un momento y yo lo hice. Sin saber que estabas planeando hacer ese momento, pero de pronto sentí como tus labios se juntaban con los míos.
Tus labios eran tan suaves y aquello hizo que quisiera besarlos por un momento, consideré probarlos como algo único.
Decidiste profundizar el beso con algo de paciencia, sentí alivio porque no fuiste agresiva con tus besos como fue anteriormente.
Entonces nuestras lenguas danzaban en un rítmo frenético, fue muy romántico en ese momento hasta que decidiste detenerte.
Yo me quedaba mirando como un tonto lo que acababa de ocurrir, y no pudiste evitar reirte.
Esa risa que odiabas y ahora me hace sentir alegre al escucharla.
Después tome tu mano y nos quedamos mirándonos, perdiéndonos en esos vacíos oscuros en los que se ocultaban nuestros miedos y traumas, pero tambien se ocultaba el sentimiento mas humano y sublime de todos, el amor.

-Shinji Ikari.