Capítulo 10

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Abby estaba sentada a mi lado, mirando el lienzo que estaba frente a mí, ella había venido esta tarde llorando, Thomas le preguntó y resulta que su novia terminó con ella, no entendí lo que le dijo, pero al parecer no fue nada lindo porque Gregory estaba en la cocina diciendo que para terminar con alguien, no había necesidad de insultar.

Sinceramente, por lo que entendí, le dolió más lo que le dijo a qué la ruptura, algo sobre... Duelo en relación, no se.

Se había calmado hace quince minutos, no quería preguntar absolutamente nada, no era de mi incumbencia pero era raro verla tan apagada. Habíamos hablado el tema que nos había distanciado, quedamos bien y seguiremos hablando, dijo claramente: Quiero ganarme tu confianza y quiero hacerlo bien.

—¿Como lo haces?—Sorbe su nariz y apunta el lado donde hacía el degrade de los colores—Pusiste tres colores y con un solo pincel, hiciste que quedara así.

Tomó su mano, pongo el pincel limpio en ella y pongo otros dos colores en el lienzo, para terminar de combinar los colores, guió su mano para que deslice el pincel sobre la pintura, siento su mirada sobre mi y no sobre la pintura.

Su mirada sobre mi me pone nerviosa, de ilusa creí que la semana y media que estuve alejada de ella, todo ese nerviosismo e interés que sentía por ella, desaparecerían, pero no, no fue así, el día que estuvo en mi cama durante dos días, me di cuenta que lo único que hicieron, fue ocultarse.

Porque estar pendiente de Abby, esos días, viendo las sonrisas, viéndola dormir, como me abrazaba para poder dormirse, escucharla hablar de lo que le gustaba, de que la ropa que hacía le apasionaba y le encantaba ver como a la gente le gustaba. Estar con Abby solo me confirmo, que la única chica que me llama la atención, es ella, porque incluso he conocido a algunas chicas y mi cabeza solo las compara con Abby, y sigue prefieriendo a Abby.

—Mira el lienzo, no mi cara—Murmuró sin despegar la vista de nuestras manos.

—Lo siento, me gusta tu perfil—Aclara su garganta y fija su vista en el lienzo—Es que, aunque guíes mi mano, no entiendo.

—Es cosa de práctica y vocación, Abigail.

—Aún no me dices, Abby.

—Aún no te perdono del todo—Relamo mis labios y escucho su suspiro.

—Haces que mi fachada de chica ruda no me dure—Mira con atención como deslizó el pincel sobre el lienzo—Pero si, lo merezco.

No digo nada, solo me concentro en terminar la pintura, que es para mañana. Si, hago todo a última hora cuando se que puedo terminarlo en unas horas.

—Me debes una salida—La miro alzando una de mis cejas—Vamos, Genevive, me la debes, lo prometiste.

—No pienso ir de fiesta.

—¿Cuando tenemos fiesta y porque la invitas a ella y no a mi?—Gregory se deja caer en el sofá y nos mira ceñudo.

—Mañana hay una fiesta y le digo a ella porque me lo prometió hace unas semanas—Toma un pincel y lo llena de pintura.

Mancha mi mejilla con pintura y levanto la mano, la cual tengo llena de pintura y la paso por su cara, Gregory suelta una carcajada y Abby abre su boca ofendida mientras yo solo tengo mi vista fija en el lienzo, con una sonrisa divertida.

—Ni se te ocurra ocupar mis pinturas, después las pagas tú—Advierto, apuntando mi pincel lleno de pintura directamente a su cara.

—No haré nada si vienes conmigo a esa fiesta.

—No es negociable, Abigail, ya dije que no iré, no me gustan—Vuelvo a prestarle atención al lienzo.

—Voy a derramar todas tus pinturas en la piscina.

Bajo una tormenta. {✓]Where stories live. Discover now