Capitulo Cuatro ♡ "Intercambio de Cartas"

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Lisa había ocasionado un gran morado en la mejilla de Kevin, obviamente su mamá tuvo que ir a hablar con la mamá de Lisa, está comentó que no iba a volver a pasar y que le ofrecían disculpas, todo eso no hubiera pasado si Kevin no le hubiera quitado sus galletas a Lisa.  En fin el niño lloro como si no hubiera un mañana echando a perder la fiesta de Maty.

Al día siguiente en la escuela, Kevin llevaba un parche en aquel morado, se sentó junto a Lisa con cara de pocos amigos, la niña lo miro con preocupación, había comprado unas galletas para él, eran de las mismas que él le había quitado en la fiesta, la niña pensó que si le compraba un paquete nuevo quizás y la perdonaría por haberlo golpeado.

— Hola Kevin, compré esto para ti, quiero disculparme por haberte pegado. — Lisa puso las galletas sobre el pupitre, Kevin las tomo y con un gesto desagradable las tiro al piso.

— ¡No quiero nada, me has golpeado y eso nunca te lo voy a perdonar, por tu culpa mi mamá me ha castigado y no me dejara inscribirme a un equipo de fútbol, ya estaras contenta! — realmente eso hizo sentir mal a Lisa, le había ocasionado problemas a Kevin, sintió cómo sus ojos se llenaban de lágrimas, se agachó para recoger las galletas, y volver a su asiento.

Kevin se dió cuenta que Lisa tenia los ojos llenos de lágrimas y eso hizo que se sintiera mal, no le gustaba verla triste y mucho menos saber que él lo ocasionaba, pero igual por su culpa él estaba castigado... Kevin le dió la espalda, no quería ver aquellos ojos tan bonitos repletos de lágrimas.

Todo ese día Kevin se la paso ignorando a Lisa... Y claro Lisa decidió respetar su espacio, no quería ser una niña metiche, ni mucho menos quería que él volviera a hacerle algo grosero.

Ese día la maestra estaba viendo el tema de los medios de comunicación, estaban viendo la carta y cada una de sus partes.

— Ustedes harán una carta, está será para alguno de sus compañeros  — explico la maestra. — Luego me la entregarán y yo las repartiré, tienen 30 minutos.

Lisa escogió a Wendy, así que comenzó a escribir la carta, incluso también hizo dibujos, miro a la dirección de Kevin quien estaba tapando con la mayoría de su cuerpo lo que estaba haciendo, quizas él pensaba que le iba a copiar sus ideas, pero a diferencia de las matemáticas a Lisa le encantaba ser creativa y seguramente su carta le gustaría a Wendy.

El tiempo se había acabado y todos entregaron sus cartas a la maestra, quien enseguida comenzó a repartirlas.

— Lisa Reyes — con emoción, la pelinegra se levantó de su asiento y fue por la carta, regreso a su lugar mientras escuchaba como la maestra continuaba mencionando nombres, pero nuevamente la nombró a ella. — Vaya Lisa, tenemos otra para ti.

Lisa algo extrañada pero a la vez emocionada fue por la carta y al regresar vio unas letras descuidadas, parecían ser de un niño, a diferencia de las letras de Wendy.

La carta le dió curiosidad, Kevin la observaba con una ceja enarcanda, él solo había recibido una carta, vaya sorpresa y eso que tenía tres amigos en el salón. Sin darse cuenta de que Kevin la estaba viendo Lisa abrió la carta, la cual decía:

Hola, Lisa eres bonita, me gusta tu sonrisa y los oyuelos en tus mejillas, también me gusta como tus ojos se hacen pequeños cuando te ríes, eres una niña que en verdad me gusta mucho, no me gusta que Kevin te moleste, tampoco me gusta verte triste, ojalá pudiera dejar de ser tímido y acercarme a ti. Te quiere tu amigo secreto.

Lisa se ruborizó cuando termino de leer aquella carta.

— ¡Déjame verla!

— ¡No, es mía Kevin! — demasiado tarde, Kevin ya le había arrebatado la carta de las manos y ya la estaba leyendo — Eres un metiche, que te importa.

— ¡Niños! — llegó la maestra y los reprendió.

— ¡Kevin me quito mi carta!

— Eso no sé hace Kevin,debemos respetar, me temo que tendré que hablar con tu mamá, últimamente has tenido malos comportamientos.

— No, maestra por favor.

— Lo siento, pero debo hacerlo, ahora regresa la carta.

Kevin le regreso de mala gana la carta, la maestra se retiro cuando se aseguro que todo estaba bajo control.

— ¿Quien te escribiría eso? — hablo el niño — no eres nada de lo que dice esa carta, eres la niña más fea del salón, no, mejor dicho, la más fea de toda la escuela y probablemente de la ciudad — aquellas palabras para el niño no eran real, pero estaba algo molesto de que otro niño le dijera esas cosas — tienes cara de moco y también te pareces a la Chilindrina, y a parte eres lenta y burra. — la fulmino con la mirada — se me había olvidado, también eres una busca pleitos y una chismosa llorona cara de perro.

Estaba harta de las ofensas de su compañero, pero a pesar de eso, ella solo quería llevarse bien con él, pero tal parecía que eso nunca iba a pasar, el se empeñaba en hacerla sentir miserable, ¿Por qué era así solo con ella? Y claro con Wendy, pero con ella por qué lo retaba, pero Lisa se había dado cuenta que Kevin era bueno con otras niñas, ¿Que había de malo en ella?

Lisa se levantó de su lugar y pidió permiso para ir al baño, solo quería ir a llorar sin que ese niño la viera.

Mi Primer Error Favorito |Kevin Álvarez| [FINALIZADA] Where stories live. Discover now