ʟᴀᴛᴇ, sᴋɪʀᴛ ʙᴏʏ ｢sʜᴏᴡᴋɪ || ᴄʜᴀɴɢᴋɪ｣

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Tuvo que disculparse mil veces con Nako por devolverle su falda mojada -por haberla limpiado en otro baño- y su blusa sin un botón menos que no sabe en qué momento se cayó, pero la chica le había restado importancia porque de alguna u otra forma sabía que algo así pasaría, y le devolvió su uniforme de igual manera.

Cuando terminaron las clases ese día, se veía tan derrotado que no pudo aguantar más, y terminó llorando como bebé en medio de sus cuatro amigos cuando el salón de clases se vio vacío, sacando toda la rabia, pena y desconsuelo que tenía mientras recibía caricias de Hyungwon, Changkyun, y Jooheon  detenía por los pelos a Minhyuk de ir a enfrentar a Hyunwoo por su cuenta.

De ese día, habían pasado dos semanas. Dos semanas en donde se dedicó a borrar cada rastro de Son Hyunwoo encima suyo, de bloquear en cada parte al pelinegro y de evitar lo más posible de encontrarse con él en cualquier circunstancia. Aún quedaban heridas en sus piernas de lo fuerte que se había pasado la esponja en la ducha para quitarse esas marcas de encuentros anteriores, aún tenía la costumbre de mirar su teléfono o de incluso esperar por el auto de Hyunwoo cada martes y jueves. Pero se había decidido en que no se arrastraría más por Hyunwoo ni seguiría siendo un secreto, y lo estaba logrando, con la ayuda de todos.

Lloró dos días, bueno, tres en realidad, pero se sintió patético -que novedad- al darse cuenta de que él era el único mal de la extraña relación que tenía con Hyunwoo, así que dejó la lloradera de lado y decidió actuar.

"Estás comiendo más", levantó la cabeza hacia Hyungwon a la hora del almuerzo, viendo la orgullosa sonrisa del peliazul y sintiéndose algo tímido.

"Lo está, yo lo estoy ayudando", Changkyun habló esta vez, sujetando la mano de Kihyun por debajo de la mesa y brindándole apoyo silenciosamente. Kihyun se apoyó en aquel toque, removiendo con su otra mano el arroz en su bandeja.

"Eso es bueno, te ves lindo, Kihyun hyung", Jooheon alagó, causando que se pusiera más tímido aún. No era algo típico de él, pero luego de su ataque de rabia hasta su autoestima se vio involucrada pensando que quizás Hyunwoo nunca lo encontró lo suficientemente bonito para decirlo.

"Ya, basta", murmuró, sintiendo el apretado toque de Changkyun en su mano y sintiéndose a gusto.

Él igual se sentía más lindo, más a gusto, el tono pálido de su piel se había ido y sus llorosos ojos se habían esfumado, ya no tiraba la comida a la basura o se la daba a alguno de sus amigos antes de que terminara el almuerzo. Y definitivamente se había dado el ánimo de comprarse una falda solo por gusto propio por internet, obvio sin decirle a nadie aún, se seguía sintiendo algo avergonzado respecto a eso.

"No te ha vuelto a buscar, ¿o si?", preguntó de pronto Minhyuk, dejando la mesa en silencio y obligando a Kihyun a levantar la mirada hacia su grupo de amigos expectante.