Todo lo que pudimos ser • LeoFiat •

Capítulo tres

Entraron a la fiesta, de inmediato las miradas se posaron sobre ellos y los murmullos no se hicieron esperar, había gente halagando lo bien que se veía Leo, otros más creaban teorías de porque había llegado con Fiat, sin duda ambos habían llamado la atención.

– ¿Quieres algo de beber? – Fiat fue el primero en hablar para romper la incómoda situación en la que repentinamente se encontraban, Leo asintió y el más bajo se dirigió a la cocina donde seguramente tendrían las bebidas, al llegar ahí sirvió lo mismo en dos vasos y antes de irse una voz conocida lo llamó.

– ¿Tan pronto te volviste cercano al nuevo? Cada día me impresionas más, Fiat – Era Pat quien se había puesto frente al antes mencionado.

– ¿De que hablas? Se ofreció a traerme y acepté por cortesía –

– Te conozco Fiat, ya pusiste el ojo en el próximo que quieres en tu cama, pero ¿sabes? No está mal volver a los viejos lugares... Podríamos ir ahorita, a la habitación principal... Traigo condones –

– Lo de la fiesta pasada fue solo una vez, no lo volvería a hacer contigo, no me gustó, así que si me permites – Fiat volvió a tomar los vasos y se dirigió fuera, le entregó uno a Leo y el mismo agradeció.

– ¿Había mucha gente? –

– Lo normal, solo que me topé con Pat y bueno... Larga historia – Fiat suspiró, no queriendo entrar más en el tema.

– ¿Es tu novio? –

– ¿Que? ¡No! Para nada – Fiat negó de inmediato, usando sus brazos para ser más expresivo.

– Oh, pensé que sí – Leo no pudo ocultar su felicidad al escuchar eso.

– No, no, solo teníamos un asunto pendiente pero creo que lo resolví –

– Me alegra saber eso, salud entonces – Ambos chocaron sus vasos y se dispusieron a beber, luego de un rato Fiat se levantó.

– Iré al baño, no tardo – Leo asintió y se quedó sentado.

Al salir del baño Fiat se encontró con Pat quien lo tomó fuertemente del brazo y lo llevó a una de las habitaciones de ahí, cuando Fiat logró soltarse mi miró molesto.

– ¿Que carajo estás haciendo, Pat? –

– Ya te dije que es lo que quiero y nada te cuesta dármelo – Lo aventó a la cama y se subió encima de él, comenzando a dejar besos en su cuello.

– Pat, suéltame – Fiat intentó defenderse pero debido a la cantidad de alcohol que había consumido se encontraba bastante débil, aún así no se rindió en intentar defenderse.

– Suéltalo, idiota – Cómo todo un héroe de película Leo apareció y separó a Pat de Fiat, le dió un puñetazo al antes mencionado pero Fiat lo tomó del brazo algo débil.

– Ai'Leo, no vale la pena... Vámonos mejor... – Leo negó pero como Fiat estaba suplicante terminó por aceptar.

Salieron de ahí como si nada, obviamente Pat tampoco diría nada, no le convenía, Leo y Fiat volvieron a sentarse dónde antes, el más alto miró a Fiat quien estaba algo desconcertado.

– ¿Estás bien? – Preguntó con suavidad y el menor lo miró asintiendo un poco.

– Es solo que todo pasó muy rápido y afortunadamente llegaste para salvarme, no sé que hubiera sido de mi si no estabas ahí en ese momento – Leo negó, acariciando su mejilla, no quería que Fiat pensará en eso pues todo había terminado y afortunadamente no había pasado a mayores, le dió una cálida sonrisa, la cual el más bajo correspondió y así hablaron un poco para olvidarse de lo sucedido anteriormente.

– Hey, que lindo collar – El moreno habló y Fiat miró hacia donde el adverso, sonriendo orgulloso de que lo hubiera notado – ¿En dónde lo compraste? Por algún motivo me resulta familiar.

– Fue un regalo que alguien muy especial me dió en nuestro aniversario de novios – Fiat fue bastante sutil pero claro al mismo tiempo con lo que decía, Leo lo miró, aún algo confundido.

– Creí que estabas soltero... Esa persona debió ser muy importante para ti –

– Lo es... Lo sigue siendo en realidad... – La voz de Fiat era suave, cuando se dió cuenta él y el mayor estaban a solo unos centímetros de distancia el uno del otro, no sabía si era por el alcohol o porque Leo había recordado pero después de un tiempo mirando fijamente sus labios se acercó a estos para besarlos, Fiat no dudó en corresponder, quizás esto también podría servir de ayuda para que Leo recordase su pasado a su lado...