𝐷𝑖𝑠𝑎𝑠𝑡𝑒𝑟 | 𝐿𝑎𝑠 ℎ𝑒𝑟𝑚𝑎𝑛𝑎𝑠 𝐷𝑒𝑛𝑎𝑙𝑖

011

Narrador pov.

Solo tenía un asunto que resolver antes de irse a Alaska con las hermanas Denali, por lo que cazó antes de ir a lo que una vez llamó casa.

Entró por la ventana de su habitación, pudo escuchar como sus padres lloraban y aunque no quedó en buenos términos con su mamá, sus sollozos le partían él corazón.

Respiró profundamente para darse él valor que necesitaba, se subió con facilidad a su habitación mirando como sus padres estaban ahí.

-Mamá.-susurró Ashley llamando la atención de sus padres.-Papá.

Nora levantó las vista observando con incredulidad a su hija, Ashley se mantuvo a distancia. Por lo que las hermanas Denali le contaron, habían arreglado todo para que pareciera que ella había muerto en él accidente después de que se incendiara el auto.

-¿Ashley?.-preguntaron sus padres al mismo tiempo.

-Si, soy yo... No se acerquen.-les advirtió al ver como su mamá quería abrazarla, no quería lastimarla por lo que ella se puso en él rincón.

-¿Cómo... Estas viva?.-Inquirió su papá, aunque no fuera su hija biológica quería a Ashley como si lo fuera y le dolió saber que ella estaba muerta.

-No lo estoy. Al menos no del todo.-hizo una pausa y alzo la vista dejando ver sus ojos color rojo, ellos ahogaron un jadeo de sorpresa.-No se asusten... Es una larga historia.

-Lo siento tanto Ashley, yo no quise que pasara esto al decir todas esas palabras hirientes.-expreso Nora para después sollozar, se había sentido culpable por lo ocurrido.

-Lo se mamá, pero ahora debo de irme.-murmuró Ashley una parte de ella estaba emocionada por ir con las hermanas Denali y por otra no quería dejar así a su mamá.

Después de tratar de explicar cierta parte de como sobrevivió y como no podía quedarse ahí pero que tampoco la culpaba decidió irse despidiéndose de su mamá y papá.

-Te extrañaremos Ashley.-susurró su papá.

-Yo también, cuiden bien de Apolo.-pidió Ashley sabiendo que su gatito le tendría miedo, por lo que Apolo tenía que quedarse.

Ashley se alejo corriendo de aquel lugar para después ir con las Denali, quienes la esperaban en un lugar algo lejano. Kate rápidamente la abrazo, sabía lo difícil que era para Ashley alejarse de sus padres y su de Apolo.

-Estoy bien.-les aseguro con una leve sonrisa.

Al fin se sentía viva y aunque extrañaría a su familia sabia que esto era lo correcto.

-Sabemos que esto es difícil y de haber existido alguna otra solución para no convertirte lo habríamos hecho.-pronunció Irina poniendo su mano en él hombro de la castaña.

-Lo se.-murmuró Ashley pasando su brazo por los hombros de Tanya.

Después de pasar tiempo con las hermanas Denali, al fin había agarrado confianza con sus compañeras. Ahora le era imposible ocultar algo y en parte estaba agradecida de haberlas conocido.

Aunque hubieran puesto su mundo de cabeza.

-Cuando cazas te ves muy bien.-comentó Kate haciendo que Ashley riera.

-Lo dudo.-Pronunció ella acercándose a la rubia y pasando sus brazos por él cuello de ella para después besarla.

Alguien carraspeo haciendo que ambas se separaran.

-¡Irina!.-gruño Kate y Ashley rió entre dientes.

-¿Qué pasa, Irina?.-inquirió ella mirando como parecía preocupada.

-Los Cullen ha venido a vernos.-Ashley no entendía que tenía de malo por lo que fueron a la casa de inmediato, su mirada estaba en la niña que venía con ellos.

Tanya retrocedió cuatro pasos, sus rizos temblaron, como un humano confrontado por una serpiente venenosa. Kate saltó hacia atrás mientras que Irina se puso en frente de Ashley para protegerla. Un siseo sobresaltado salió de sus dientes apretados. Eleazar se lanzó en frente de Carmen protegiéndola.

Ashley no entendía nada ¿Por Qué le tenían tanto miedo a una niña?¿Temían hacerle daño?.

Estaba confundida por las reacciones de sus compañeras.

-Prometieron que escucharían.-Les recordó Edward.

-¡Algunas cosas pueden ser escuchadas!.-exclamó Tanya a la defensiva.-¿Cómo pudiste, Edward? ¿Sabes lo que esto significa?.

La niña sin duda tenía él mismo color de ojos que Bella, y parecido a Edward era simplemente una combinación perfecta.

-¿Cual es el problema?.-inquirió Ashley desconcertada al tiempo que ponía una mano en el hombro de Tanya para tratar de tranquilizarla.

-Es una niña vampiro, los Vulturi tienen prohibido crear uno.-aclaró Kate y por su tono de voz sabia que había algo más, algo doloroso.

-Ella no es una niña completamente vampiro-repuso Edward, dirigiendo su atención hacia la hostil expresión de Carmen.-Ella es mitad humana. Escúchame, Renesmée es única. Soy
su padre. No su creador, su padre biológico.

Ashley se alejo con cautela de las hermanas Denali para acercarse a la niña.

-¡No!.-dijeron al mismo tiempo las hermanas Denali queriendo detener a Ashley.

-Edward, no puedes esperar que nosotros.-empezó Eleazar pero fue rápidamente interrumpido por él cobrizo.

-Dime otra explicación que encaje entonces, Eleazar. Puedes sentir la calor de su cuerpo en el aire.Sangre corriendo por sus venas, Eleazar. Puedes olerlo.

-Hola ¿Como te llamas?.-inquirió Ashley agachándose un poco para estar a la altura de la niña.

-¿Cómo?.-Preguntó Irina desconcertada.

-Bella es su madre biológica.-le dijo Edward.-Ella concibió, cargó y dio a luz a Renesmée mientras todavía
era humana. Casi la mata. Me vi presionado a poner suficiente veneno en su corazón para poder salvarla.

La mano de Renesmée se posó en la mejilla de Ashley, estaba completamente sorprendida al ver los recuerdos que ella le compartía.

-¿Qué le está enseñando Nessie?.-pregunto Jacob.

-Todo.-Murmuró Edward.

Otro minuto pasó, y Renesmée dejó caer su mano del rostro de Ashley. Puso una sonrisa ganadora al ver como Ashley le sonreía.

-¿Estas bien?.-preguntó Tanya con desconfianza.

-Vamos chicas, ellos estan diciendo la verdad reconocería esos ojos color chocolate en cualquier parte y solo de alguien las pudo heredar.-dijo Ashley riendo un poco.

Recordando borrosamente cuando jugaba con Bella.

Pero ahora ¿Qué tenía que enfrentar para estar por toda la eternidad con las tres hermanas Denali?