GG | OO5.

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Narra Gardo.

—¿Olympia?.—susurré al no sentirla sobre mi, se había pasado la noche con casi todo su cuerpo por el mío y me sorprendió no haber notado su ausencia hasta ahora.

Fui al baño para orinar, tiré de la cadena para después lavarme las manos y terminar lavando mis dientes, todavía no había escuchado movimientos en la casa.

—Olympia.—seguí llamando.

—Estoy aquí.—su dulce voz me indicó que estaba en el balcón, salí para comprobarlo y efectivamente, ahí estaba.

Tenía su pelo recogido en una trenza que se notaba que no le puso demasiada dedicación, no como a su iPad, la nena estaba que no soltaba el pen, vi que se trataba de los bocetos de sus diseños así que supuse que pronto lanzaría una nueva colección en solitario o quizá le salió una colaboración con alguien.

—Agarré el Snapple que tenías en la cocina, no quería ser demasiado intrusiva pero es que no te despertabas y necesitaba algo que me diera energía.—observé la botella.

—Era de tu hermano, no sabía que te gustaba.

—Es mi bebida favorita también.—respondió más para sí misma que para mí.

—¿Quieres desayunar?

—Ahora no.

—¿Llevas mucho despierta?

—Sí, no podía dormir así que...—dejó de hablar cuando me senté junto a ella.—No, Lyanno...

—¿No qué?

No respondió.

—¿Estás arrepentida?.—no respondió.

—No es eso.—por fin dejó de dibujar, me miró a los ojos.—No podía dormir porque estaba pensando en Rauw, después de lo de ayer nos hemos convertido en unos traidores y no sé si podré disimular.

—Pero tú sabías cuando viniste para acá.

—No sabía que me iba a sentir tan mal.

—Vamos a dejarlo aquí porque comienza a parecer que te hice venir con intenciones ocultas y lo de ayer te pillo por sorpresa.

—No es lo que dije.

—No hace falta.

—Ocultar algo es mentir y saltarse la única norma que nos puso es traicionar su confianza.

—A Rauw no debería importarle con quien te metes.

—De seguro si tuvieras una hermana actuarias igual.

—En la teoría, en la práctica entendería que no hay cómo evitarlo.

—Yo sé...—se rascó la nuca.—Pero no puedo evitar sentirme cul...—la interrumpí besándola, sentí como ella se movía, terminó sentada sobre mi.—Estoy hablando en serio.—en el momento en que rompió el beso para decir aquello me molesté un poco, quería más.

—Entonces debería parar de besarte y deberías bajarte de ahí.

—No.—se mordió el labio.

—¿Y ese labio que ah?.—lo acaricié con delicadeza.

—Nada.—chupó mi labio inferior.—Ya, deja de distraerme.

—Mala mia.

Por fin se bajó, me miró con malicia cuando tuve que acomodarme el bicho tras ella habérmelo dejado alterao'.

—Me gusta como saben tus labios.

—Kiwi con fresa.—arrugó la nariz.—A ni me encantan, a mi hermano también , es como si hubieras besado a mi hermano.

GARDO'S GAME ; lyannoWhere stories live. Discover now