XI

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  Ese día me levante emocionada, el día anterior cierto rubio me había contado que tenia una sorpresa para mi. Estaba muy intrigada, ya había pasado mi cumpleaños y las fiestas. No entendia porque me daba un  regalo. estuve toda la noche dandole vueltas a la idea.

 En ese momento, luego de desayunar y antes de ir a nuestras clases, me tapo los ojos y me levo hasta el bosque fuera del campus.

-Es un regalo que he querido hacerte desde que nos conocimos. Me puse muy mal cuando no pudiste entrar al club de Danza. Así que en ese tiempo busqué un lugar. En el Tiempo que estuvimos peleados. Yo arreglé este lugar para ti. Y no estaba listo para navidad. Así que, aquí está.
Disfrútalo mi amor.

Me destapó los ojos y casi me caigo al suelo. Tenía ganas de llorar. Nunca nadie había hecho algo así por mi. El amor que le tenía a ese chico de ojos azules y pelo largo y rubio era inmenso. Nunca podría expresar con palabras como me sentía. Era inefable.

Era un estudio de danza. Una sala especial para bailar. No podía creerlo de la felicidad. Abracé a mi chico y le besé toda la cara. Me parecía increíble el corazón que tenía. Y a pesar de lo mal que la había pasado, siguió haciendo con mucho amor su regalo.

—No puedo explicar con palabras lo mucho que te amo. Tienes un corazón enorme que quiero cuidar y guardar para siempre. 

—Es todo tuyo, mi vida.

Lo abracé con fuerza. Estuvimos unos minutos así y me puse a llorar. No quería soltarlo. No lo haría.

—No te vayas nunca de mi vida. Por favor. Eres lo que necesito. No dejes que me derrumbe.

—Siempre te escogeré a ti, mi brujita.

Seguimos así un rato y luego él dijo:

—Bueno, linda. ¿Te gustaría ver tu regalo?

—Si si, lo siento.

—Ven...

Entramos y era más lindo de lo que imaginaba. Piso de madera, un espejo largo, que alrededor tenía luces. Y en el techo salían reflectores.

—Eres lo mejor que tengo. Estoy tan agradecida de haber llegado a esta academia y compartir cuarto contigo.
—Yo también agradezco eso. Me haz regalado momentos únicos. Nunca voy a poder agradecértelo.
Te amo Paris Geew...

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—¿Estas en algo con alguien?

—Algo así. Se llama Hadley Sparts. Es Vampiro. En realidad no somos algo. Solo nos conocemos. Nos vimos en las clases de esgrima. Nos tocó que trabajar juntas. Ahí la conocí. Es muy bonita. Castaña, de ojos claros. Con lentes negros y una cabellera enrulada.

Cuando se lo conté a Maxie lo que hizo Xavier, estaba igual de sorprendida que yo. Le encantó la idea y como ya me sentía mejor de mi pierna podía bailar. Eso era lo mejor. Llegaba en el momento justo. Podríamos bailar juntas, como antes. Todo estaba perfecto.

Está esa tarde...

Esa tarde oscura. De lluvia y de nubes.

Habíamos ido a Jericó a pasear junto a Xavier. Le dije que quería café y entré al Veleta.  Él se quedó afuera. Esperándome mientras hablaba con Ajax...

—Buenas tardes, Paris—dijo tímido Tyler. Algo no me gustaba de esa actitud.

—Buenas tardes Tyler.

—¿El Café de siempre?—con Galpin, nos volvimos muy cercanos. Se había formado.una linda amistad. Además debía decir que su café era sublime.

—Sí gracias— dije, el piso estaba bastante resbaloso y me tropecé y casi me caigo. Tyler me agarro a tiempo. Me levantó la cara con sus manos y en ese momento me besó. Yo me separé de inmediato.

Meet me at Midnight... ♡Where stories live. Discover now