PERDIENDO

113 5 0
                                    










SI BIEN habían conseguido pasar desapercibidos el uno para el otro durante prácticamente toda su estancia en Uvemorth, aquél décimo curso, y último año, lo cambiaría todo. Y su historia, además de ser algo que recordarían para siempre, no comenzaría, en absoluto, de la forma más bonita.

—Cállate —ordenó tras entrar, al mismo tiempo que ponía el cerrojo de la habitación.

Con la idea clara en su mente, decidida a hacer aquello que tanto había deseado, caminó hacia él, que estaba tumbado en su cama tratando de leer un libro. Al intentar levantarse, Sabine agarró con brusquedad el libro que traía y lo lanzó. Le empujó, haciéndole caer de nuevo sobre la cama, así como una pícara sonrisa se dibujaba en el rostro del chico.

Desabrochó por completo su corbata, se deshizo rápidamente de su camisa y falda para acto seguido trepar sobre la cama, colocándose sobre él, y besarlo hambrientamente. Después de toda una semana llena de torturas, encuentros para nada fortuitos y provocaciones, había hecho, exactamente, lo que él dijo que haría: venir en su busca. Pero eso a ella ya no le importaba. Deseaba en ese momento tanto terminar lo que se había empezado que no importaba cuán se iba a arrepentir después.

BADLANDSOù les histoires vivent. Découvrez maintenant