Una Adolecente No Tan Adolecente

Capitulo 2

Estábamos en el consultorio la doctora estaba por decir los resultados cuando sonó su teléfono.

– ¿Sí?, bien en un momento voy – colgó la llamada

– Sigamos... Felicidades estas embarazada tienes un mes –

No aguante tome el bote de basura y regrese casi todo el estómago, Paula me paso un pedazo de papel para limpiarme.

– Lo siento – dije cuando terminé

– Descuida, ahora pasen del otro lado – le hicimos caso – Lucia ocupo que te acuestes y subas tu blusa hasta debajo del pecho haré una ecografía –

– ¿Qué? Pero... –

– Cariño soy la jefa de esta área se reconocer cuando alguien está embarazada además no tapaste la marca de la aguja – señalo mi brazo que está en un tono rojizo suspirando hice lo que pido

– ¿Nadie se va a enterar de esto verdad? – pregunté nerviosa por el que le dije a mamá

– Si con decirle a los demás te refieres a tu madre no, no le diré por ética y protocolo no puedo dar información de mis pacientes a los demás, pero ten en cuenta que eres menor de edad y a la próxima cita debe de venir contigo de lo contrario puede pasar a mayores – Eso era un gran alivio por el momento – Pondré este gel está un poco frío –

Termino de acomodar el aparato y puso una cosa rara empezando la moverlo de un lado a otro luego de un rato termino y pasamos hasta donde estaba el escritorio, me dio unas vitaminas e indicaciones de lo que debo comer y que no bueno más bien comer lo menos posible cosas chatarra y más cosas nutritivas ya que es cuando el "feto" necesita más vitaminas para su crecimiento sano.

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Ya estábamos en mi casa volví a comer ya que me dio hambre por vomitar todo lo que tenía en el estómago, en mi cuarto nos pusimos a ver una película, pero no le estaba prestando mucha atención seguía pensando en lo de hoy tendría que conseguir blusas sueltas y grandes para que más adelante no se note tanto. La doctora dijo que tengo casi 4 semanas y estaba en perfectas condiciones, pero debía comer bien.

Tengo ahorros, pero no es tanto podría comprar algunas cosas para el bebé más adelante pero no voy a estar de gratis en casa de mi hermano él ya trabaja y gana su propio dinero solo mis padres pagan sus estudios yo aquí no pagó nada ya que no trabajo y todo me lo dan nunca me ha faltado nada, pero las cosas cambiaran ahora.

– ¿Crees que se den cuenta? – pregunté de pronto

– ¿Quienes? –

– No lo sé todos, mis padres, los del instituto– me encogí de hombros volteando a verla

– Hay linda sé que será difícil, pero todo siempre sale a la luz y no sé cuánto puedas guardar el secreto, bueno de tu hermano no puedes ya que vivirás con él, pero hay que tener cuidado con tus padres este tiempo que queda de instituto –

– Si tienes razón, pero aún no estoy lista para que ellos lo sepan, al irme me pueden mandar dinero y si saben ya no podré hacer nada porque ¡vamos! quien me contrataría estando embarazada y menor de edad – suspiramos

– Si que tienes razón, pero prometo ayudarte con todo, no estarás sola y lo sabes me tienes a mi –

– Y por eso te quiero – le dije mientras abrazaba

– Oh ¿solo por eso? – se hizo la ofendida

– No seas tonta – la moví con el hombro

– Yo también te quiero – nos quedamos recargadas en el respaldo viendo la película, poco a poco sentí mis ojos pesados dejándose llevar caí en un profundo sueño