𝘾𝙖𝙢𝙗𝙤𝙮 [Soukoku]

Capítulo tres

Advertencias: CONTENIDO NSFW DESTINADO PARA UN PÚBLICO MAYOR. Lee bajo tu responsabilidad.

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Un viernes en la noche era probablemente su mejor noche para ganar dinero.

Dazai comenzó la transmisión cerca de las ocho de la noche en punto, pensaba que si lo hacía en un horario flexible, más donaciones llegarían. Sonrió cuando mensajes halagando su cara, su cuerpo y ropa inundaron su chat. Incluso tuvo el descaro de coquetear con algunas chicas diciéndole que le gustaban las mujeres dominantes.

—De acuerdo, hoy me preparé porque sé lo sádicos que pueden ser algunos de ustedes —soltó una risita burlona, hasta que alguien puso algo desagradable en el chat—. Oye, pero me veo lindo.

Le encantaba la facilidad con las que esas personas caían ante él, no solo porque lo vieran tan jodido como para no poder cerrar las piernas correctamente al día después, no, esta gente lo apreciaba y deseaba, aunque sí sentía repulsión por lo que descaradamente lo miraban como un pedazo de carne en medio de una jaula llena de leones. Entonces, a Dazai le gustaba tener el control de la situación, ser el que decide que hacer y cuándo hacerlo.

—De acuerdo, hoy tengo conmigo este nuevo juguete, es un anillo vibrador —enseñó a la cámara como se abría y cerraba—. Esto ayuda a los hombres a que sus erecciones duren más y se vean más grandes de lo que realmente son, también leí que puede estimular ciertas partes femeninas —eso fue más un susurro personal, sin perder el tiempo, lo puso en dónde se suponía que iba—. El reto es terminar solo con esto puesto, y no puedo tocarme hasta que la mayoría de gente vote por eso.

La encuesta en las pantallas era toda una trampa, por pequeñas donaciones era un simple "Sí" o "No" si querías invertir más dinero la barra avanzaba más rápido, y era el equivalente a diez votos.

El castaño de cara divina se acarició levemente para lograr la máxima dureza de su miembro. A su vez, se acomodó en el colchón boca arriba tratando de relajarse. El anillo recibió una notificación haciéndolo temblar.

Pasado unos minutos la encuesta mostraba una mayoría a favor de no dejarlo terminar. Dazai no era idiota, sabía que si no le permitían sentir placer frente a la transmisión y necesitaba hacerlo, lo haría una vez terminará su show. Pero era frustrante, esta gente que decía adorar su cuerpo, ahora mismo lo torturaban.

—Por fa~vor, ¿No he sido bueno? —un intento de verse tierno mientras mordía sus labios y el sudor bajaba por su abdomen desnudo no era muy adecuado, pero extrañamente funcionaba, era adorable—. ¿La diferencia es de diez votos? N-no sean malos conmigo —logró decir entre jadeos tratando persuadirlos a darle la pronta liberación.

Era un sentimiento extraño el que comenzó a florecer en su pecho cuando un comentario destacó de otros por los likes que recibió >>¿Estás tan desesperado?<< Su remitente era @Araha_baki. El joven de cabellos cobrizos usaba audífono mientras lo observaba curioso por su reacción.