Golden boy / Gavi

Capítulo 10

Pablo Gavi

Estaba junto a Xavi mirando como las chicas hacían pases. Estaba observando a Elaia cuando me di cuenta de lo mal que jugaba. Habían pasado unos minutos y seguía jugando.

Seguí mirando a otras chicas cuando vi que Xavi corría hacia Elaia, que estaba en el suelo, así que corrí tras él.  

- ¿Estás bien? -preguntó Xavi mientras se acercaba a Elaia.

- No, me he torcido el tobillo - le contestó y enseguida supe que puso el plan en marcha.

- Gavi, llévala a enfermería a que le miren el tobillo. - me dijo Xavi.

- Ahora mismo - contesté.

Le ayudé a levantarse, pasé su brazo por mis hombros, le agarré de la cintura y caminamos hasta salir del campo.

- Ya está, ya puedes actuar normal, no nos ve nadie - dije.

- Que me lo he torcido de verdad imbécil.

- ¿Qué? No hagas bromitas eh.

- Que no, que va en serio.

- Joder, espera.

Le cogí como un bebé para que no caminara y no se hiciera más daño y la lleve a enfermeria.

- Gracias - habló antes de entrar.

- El día que dejes de decir gracias montaré una fiesta - reí - no es nada, tranquila.

Entramos a enfermería y hablé.

- Hola, venimos porque esta chica estaba haciendo una actividad y en un pase le dió mal al balón y se ha torcido el tobillo.

- Hola, déjala en la camilla - contestó.

Me acerqué a la camilla y la senté.

- Vale, vamos a ver cómo está - dijo la enfermera poniéndose unos guantes - quítate el calzado y los calcetines.

Elaia obedeció y la enfermera le empezó a tocar y a mover el tobillo mientras Elaia ponía cara de sufrimiento.

-  Esto pinta mal, aquí no podemos hacer nada, deberás ir a urgencias - dijo la enfermera.

- Joder - bufó Elaia.

- Ves a recepción y te llevaran.

- No se preocupe, la llevo yo - dije.

- Perfecto, pero igualmente tenéis que ir a recepción y llamar a sus padres. Deben venir y daros la tarjeta sanitaria.

- No pueden, están en Londres - habló Elaia.

- Entonces Paco, el recepcionista, debe de tener una fotocopia de cuando tus padres hicieron el papeleo, id a preguntar. - explicó la enfermera.

- Perfecto, gracias - dije para volver a coger a Elaia y salir de allí.

Llegamos a recepción y bajé a Elaia para poder hablar con Paco.

- Paco, necesitamos la tarjeta sanitaria de Elaia - dije.

- ¿Y eso? - preguntó mientras rebuscaba entre papeles.

- Se ha torcido el tobillo en una actividad, la he llevado a enfermería pero dicen que pinta mal y es mejor ir a urgencias. - contesté.

- Está bien - habló mientras me dió el papel - que no sea nada.

Volví a coger a Elaia y la senté en un banco que había en recepción. 

Elaia

Gavi me sentó en un banco de recepción y sacó el móvil para llevárselo a la oreja.

- Pedri, ¿puedes venirme a buscar a la Masia?

- Necesito que me lleves a urgencias.

- No, no, por Elaia.

- Te lo explicamos por el camino.

- Perfecto gracias.

Después de esa pequeña conversación colgó.

- Pedri viene ahora, nos lleva él - dijo.

Hice el amago de hablar pero Gavi se adelantó.

- Ni se te ocurra decir nada.

Reí y llevé mi mano a mi boca para cerrarla como si fuera una cremallera.