Capítulo 27: ¡No te lo vas a llevar!

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Knuckles estaba en su oficina, hablando con un soldado

Knuckles: ¿Entonces te confirmaron que van a venir?

Soldado: Si, señor, pero si gusta, puedo decirles que todavía no es momento

Knuckles: No, si les decimos eso, van a dejarnos en esta maldita ciudad

Soldado: Entiendo, señor

Knuckles: Bien, ve avisar que alisten todo

Soldado: Cómo ordene, señor

Knuckles: Bien, puedes retirarte

Soldado: Si, señor

El soldado se fue dejando a Knuckles, solo en su oficina

Knuckles: Tikal ya debería estar aquí, ¿Lo habrá logrado?, Tal vez debía haberle dicho sobre el monstruo y que hay más mutados por esa parte de la ciudad

Knuckles miro el reloj

Knuckles: Diablos, ¿Dónde estás Tikal?

Silver y Blaze ya se habían despertado y como en los últimos dos días habían ido al pateo a ver si Tikal ya había regresado.

Silver: Todavía no ha vuelto.*triste*

Blaze: No te preocupes, ella ya vendrá, nos lo prometió

Silver: Si es cierto.*sonríe*

Lewis y Marcia los vieron y fueron por ellos

Marcia: Chicos no vuelvan a desaparecer así

Blaze: Lo sentimos

Lewis: Si algo les pasa esa echidna es capaz de sacarnos la cabeza

Marcia: Y así dices que no le tienes miedo.*sonríe*

Lewis: Olviden lo que dije.*molesto*

Marcia, Silver y Blaze empezaron a reír, luego fueron a tomar desayuno tranquilos con la esperanza de que hoy si Tikal volviera

Pasaron las horas y Silver y Blaze estaban jugando mientras que Lewis estaba trabajando. Marcia estaba mirando a los niños

Knuckles estaba en su oficina arreglando los detalles finales, pero lo que había descubierto recientemente lo había sorprendido, no podía dejar de pensar en otra cosas que no sea eso

Todos estaban haciendo sus actividades, cuando se escuchó las hélices del helicóptero que se estaba aproximando, todos vieron un helicóptero que se estaba aproximando al campamento

Silver: Debe ser ella.*sonríe*

Blaze: Si es ella, estoy segura de eso.*sonríe*

Un soldado fue avisar a Knuckles de la llegada del helicóptero

Knuckles: ¿De verdad?

Soldado: Si, señor

Knuckles: Voy para allá

El helicóptero estaba bajando al campamento. Todos se acercaron para ver si se trataba de Tikal. Finalmente el helicóptero toco el suelo

Knuckles había llegado justo en ese preciso momento

Todos vieron como de este salía Tikal llena de sangre y heridas, con una cara de pocos amigos. Al verla todos le aplaudieron por la valentía de haber salido a enfrentar a esas cosas y llegar con vida

Tikal estaba buscando con la mirada a Knuckles y lo vio a lo lejos con una sonrisa, ella bajo del helicóptero y fue directo a él

Knuckles:*sonríe*. Sabía que lograrías querida...

Gracias MamáWhere stories live. Discover now