Les juegas una broma excitante
—Cyno
Estabas en casa de Cyno, aprovechaste que los Aranara te dijeron que el Nara blanco había ido al desierto. Ahora estabas aburrida no sabías cuando llegaba así que te pusiste a buscar algo con lo que entretenerte. Viste un conjunto de cartas pero las dejaste en su lugar al no saber para que son. Al final decidiste coger unos libros, le dabas gracias a los Aranara por dejarte todos esos libros que se encontraban, si no, no entenderías lo que decía el libro
El tiempo pasó y al siguiente día Cyno había llegado a su casa y lo primero que vió fue unos libros tirados. Se puso alerta ante cualquier amenaza grande fue su sorpresa al verte dormida en su cama con un libro a tu lado. Suspiró de alivio te quitó el libro y se dispuso a observarte. Al poco rato te ibas despertando y cuando lo viste tu primera acción fue golpear su mejilla
—Cyno—dices soltando un bostezo y el te señala su mejilla que tenía tu mano marcada—¿Te acabo de pegar?, Perdóname
—Bueno hiciste bien fue una buena reacción ante algo que te asustó—dice razonando con sus brazos cruzados, te acercas gateando hacia el quién se sonrojó al verte delante de él en esa posición
—¿Te duele?—preguntas sentándote en su regazo para poder bien su mejilla
—Ya no duele—desvía su mirada y tú te abrazas a el pegando tus pechos al suyo—Oye ______ separaste un poco—iba a tomar tu hombro para separarte pero por unos razón extraña su mano acabó en uno de tus senos—No es lo que piensas
—Se amoldan perfectamente—dices viendo como la mano del chico estaba en tu seno—Cyno jugaré un poco contigo—anuncias acostandolo en el suelo pasas tu lengua por todo su abdomen escuchando sus suspiros cuando terminas de jugar con su torso cogiste sus manos y las pusiste en tus senos, el inconcientemente los apretó haciendo que sueltes un gemido y sientas como algo choca en tu muslo te ríes y te le acercas a su oído para gemir y jugar con este. Las manos del chico iba lentamente a tu trasero y detuviste todo lo que estabas haciendo—Creo que ya me divertí lo suficiente, te veo en otro momento—caminas rápidamente hacia la puerta y la cierras el pobre juez se quedó estupefacto en el piso, cuando ya entendió tu broma chasqueó los dientes
—Esto no es divertido
—Tighnari
Desde que son pareja empezaste a visitar más al chico y a veces te quedabas a dormir con él, así que no le sorprende ver una nueva muda de ropa en su armario. Está preocupado por tí ya que sabe que la relación con tu madre va de mal en peor así que intenta no sacar mucho el tema pero cuando lo saca intenta hacer todo lo posible para que te reconcilies con ella
—Tighnari ya te dije que no, ella y yo somos como el agua y el aceite
—Aunque sea así las personas se entienden hablando—dice anotando algo que hizo con sus experimentos
—Te recomiendo que no lo hagas, es explosivo—se detiene, te posicionas detrás de él—Para evitarte un accidente deberías alejar las cosas Pyro de las Electro y Dendro—mueves sus manos alejandolas de las sustancias de colores, ves sus lindas orejas y como siempre las aprietas algo fuerte haciendo que se queje
—Nunca te cansas—lamiste la parte trasera de su cuello haciendo que sienta un escalofrío
—No—dices para repartir besos por todo su cuello dejando marcas bajas tus manos por su pecho, abdomen hasta llegar a su regazo donde su miembro estaba ya despierto acariciarte por encima de la tela para meter la mano tocando su erección directamente
—De... Detente—gime y tú lo ignoras, apretaste su longitud haciendo que suelte otro gemido. El sonido de la puerta los interrumpe y sacas rápido tu mano y el intenta tranquilizar su respiración—Adelante
—Tighnari-san podrías ayudarme en algo. Oh—Collei se detiene al sentir el ambiente algo pesado—¿Interrumpo algo?
—No te preocupes yo ya me iba—sales de la habitación y el chico suelta un suspiro
—Al-Haitham
—¿Podrías poner atención?—preguntas mirando a tu novio quien ignoró la pregunta y siguió con su lectura, la chica infla las mejillas sonreiste ante una idea que cruzó tu mente te escondiste debajo del escritorio y le bajaste los los pantalones y ropa interiores sacando su miembro
—_____ no lo hagas Kaveh llegará pron... Ah—lames lentamente la longitud del chico callandolo
—Debería ponerme celosa de Kaveh, siempre estás con él, creo que salir conmigo es solo una tapadera—dices y chupas la punta
—Que estas... ¡Ah!... Estás equivocada
—Entonces...Demuestramelo—dices y la puerta es abierta por el compañero de cuarto del chico
—¿Qué estás haciendo?. No importa sobre los documentos
—¡Ah!—gime cuando metes toda su longitud en tu boca, su amigo lo ve extraño—Me cabo de golpear—se excusa
Querías reírte ante lo que dijo tu novio pero debías ser silenciosa y además tenías su miembro en tu boca. Subes y bajas tu cabeza pasando tu lengua por todo su miembro. Ignorando el tema del que hablaban ambos chicos muerdes un poco la longitud y el suelta un gemido más agudo
—Creo que deberías descansar estás muy rojo. Te veré otro día—el rubio se va de la habitación dejándolos solos, dejas tu trabajo y sales del escritorio, felizmente te acercas a la puerta
—Deberías relajarte un poco cariño estabas muy tenso—dice y sales de la habitación con una sonrisa
—_____ cuánto tiempo—dice Kaveh al ver a la chica
—Igualmente
—¿Estas bien te veo colorada?—pregunta mirando tus mejillas rosadas
—Si estoy bien, de hecho estoy mejor que otros días
—Me alegro deberías tener cuidado con las enfermedades, Al-Haitham también parece enfermo
—No me digas—dices burlona y comienzas a hablar con el rubio
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~Al fin terminé este capítulo~
~ He estado pensando en cambiar mi forma de escribir, ya que haré un escenario de cada chico~
~Esto se debe porque no creo poder hacer un capítulo con todos los personajes quitándote tu primera vez. Prefiero que un capítulo se centre en un personaje~
