•★Te deseo mucho, hermanito★•

•Todo estará bien, Amane•

Unos chicos se encontraban molestando a uno de sus compañeros detrás de la academia Kamome, el chico al que molestaban era Yugi Amane, el mayor entre los 2 hermanos Yugi. Su hermano menor era Yugi Tsukasa.

— P-Por favor — suplicaba Amane entre llantos — n-no me lastimen m-más por f-favor.

— Pareces una niñita — dijo uno de los chicos que lo molestaban — si eres hombre defiendete, ¿Que esperas? Y ni se te ocurra gritar para que tú hermano venga.

— Si, a diferencia tuya el fuerte y puede derribarnos si quisiera — argumentó otro chico — no puedo creer que sea el hermano menor el que tenga que defender al mayor, debería ser al revés, eres un debilucho Amane.

— Si, mejor muérete de una vez si no quieres que te sigamos lastimando — dijo un tercer chico agarrando el cabello de Amane — seguro si te suicidaras nadie más que Tsuchigomori-sensei y tu hermano notaría que te fuiste.

— ¡S-Solo cállense! — volvió a hablar Amane — p-por favor ya de-dejenme en p-paz...

— Agh, ustedes vayanse — les dijo el chico que parecía el mayor del grupo a sus amigos — yo le diré un par de cosas más y listo.

Sus amigos asintieron para dejar al más violento del grupo con Amane, totalmente solos. Cuando el chico se le acercó Amane tembló demasiado y se cubrió su rostro poniendo sus brazos adelante de este en modo de protección para no recibir más golpes, al menos no recibir más golpes en la cabeza.

— Oye, mírame a los ojos, Amane.

— N-No...

— Que me mires o te juro que te va a ir peor mañana.

Amane tembló aún más pero decidió mirar al chico a los ojos, no quería que le fuera aún peor de lo que ya le iba.

— Así me gusta — el chico lo agarro del mentón alzando un poco más la vista de Amane y entrelazarla con la de el mismo — dime...¿Por qué crees que te molesto siempre?.

— N-No lo s-sé...t-tal vez po-porque s-soy el más c-cobarde de l-la clase...

— Esa es más la razón de mis amigos, pero no la mía.

— N-No sé...

— Bueno Amane, como no sabes te lo mostraré — el chico se fue acercando a los labios de Amane hasta terminar besándolo — me gustas, Amane, pero estar contigo en público arruinaría mi reputación, por eso te molesto, para tratar de olvidar mis sentimientos por ti pero no he podido.

Amane no sabía que decir, era su primer beso y se lo había dado su bully, solo se quedó callado.

— Si no vas a decir nada supongo que me voy, y ni se te ocurra decirle a tu hermano algo de lo que pasó aquí — dijo el chico dejando a Amane en el piso — nos vemos mañana, Amane~.

Amane se quedó solo. Quería ir a la enfermería pero no podía caminar, los golpes que le habían dado en todo su cuerpo le dolían demasiado. Después escuchó una voz detrás de el.

— ¡Amane, al fin te encuentro! — dijo Tsukasa abrazando fuertemente a Amane por detrás.

— T-Tsu-Tsukasa m-más despacio, p-por f-favor — dijo Amane empezando a llorar del dolor — m-me duele todo...

— ¡¿Eh?! — exclamó Tsukasa dejando de abrazar a Amane para ponerse delante de el y poder ver su rostro del que corrían lágrimas por sus mejillas — ¿Quien te hizo estos golpes?.

— N-Nadie m-me caí y me hi-hice e-estos g-golpes.

— No te creo, una caída no te puede dar tantos moretones y cortadas, ¿Quien fue el idiota? Lo voy a matar — empezó a decir Tsukasa levantándose del suelo queriendo buscar culpables.