Infancia JJK • #01 (COMPLETA)

Capítulo 3: No seas celoso

Las maestras del salón han hecho un pequeño juego, DaeYoon está a mi lado, siempre nos sentamos juntos desde que nos hicimos amigos. El juego consiste en hacer algo con nuestras manos para el niño o la niña que tenemos al lado, hay todo tipo de materiales y si necesitamos ayuda podemos pedirla. Sin dudarlo comienzo a trabajar en mi idea (la cual no es tan complicada al menos en mi mente), por unos minutos el salón está en silencio con cada niño ocupado en sus puestos. Hay varias mesas grandes llenas de niños.

DaeYoon y yo no hablamos nada, estuve tan enfocado en lo mío que no puse atención en la persona junto a ella. Kim YuGyeom era un niño muy amable y simpático, Dae decía que le parecía dulce, incluso se sonrojaba tontamente (lo cual no me gusta), mi rosa hecha de papeles de colores no es tan especial cuando YuGyeom le hizo una también a Dae incluso cuando no le tocaba darle nada a ella, Dae le había regalado un pequeño cuaderno hecho por sus manos (era realmente buena en eso)

¡Pero una vez más odio a ese chico!

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Somi está en su silla de comer, sus mejillas están llenas mientras mastica viendo desde lejos el televisor encendido. Mamá toma asiento una vez que los tres tenemos servida la cena, ella está junto a Somi. No tengo ganas de comer, mi estómago siente algo raro cuando recuerdo que YuGyeom le dio una rosa a Dae.

— ¿Te sientes bien, cielo?

—No—hago un puchero jugando con mis palillos—Un chico le dio una rosa a DaeYoon.

— ¿Eso es malo?

—Yo le regalé la rosa primero.

—Espera, no entiendo, ¿Me explicas mejor?—limpia la boca de Somi con una servilleta.

—La maestra nos hizo crear un regalo para la persona que estaba sentada a nuestro lado, a mí me tocó Dae y a ella le tocó otro niño—entonces me molesto—Ese niño le dio la misma rosa que yo hice, es un copión.

Mamá se ríe un poco negando con la cabeza.

—Tal vez tuvo la misma idea, JungKook.

—Aún así, es un copión.

—Pero, ¿Por qué le dio la rosa a Dae? ¿Le tocaba regalarle a ella?

—No—juego con los guisantes—Creo que a Dae le gusta.

— ¿A ti te gusta ella, hijo?

— ¡No! Estoy pequeño para eso, Dae es mi mejor amiga, nada más.

Pero me parece que a ella no le queda claro.

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— ¿JungKook?—parpadeo varias veces viendo a Dae. Ella arruga su frente mirándome con su cabeza inclinada de lado— ¿Por qué me ignoras?

—No te ignoro.

— ¿Entonces que estaba diciendo?

—Hablabas...sobre...—no sé que decir— ¿Tu hermano?

—Estás ignorándome.

—No lo hago.

—Estás muy callado—hace un puchero triste— ¿Quieres hablar conmigo? ¿Hice algo malo?

—No, no es nada.

Tal vez no tiene importancia decirle.

— ¿Estás seguro?—no parece del todo convencida.

—Ujum.

Justo suena la campana que indica la hora del recreo, los niños salen corriendo al jardín, aprovecho de ir al baño lavando mis manos luego, al regresar a los estantes donde están los bolsos de cada niño encuentro un envase pequeño de leche de banana. Tiene una nota con una carita feliz.

"Te quiero mucho.
D"

Sonrío tontamente buscándola con la mirada, está afuera sacando su comida de su envase. Sin pensarlo salgo corriendo al jardín y al tenerla cerca la abrazo con fuerza.

—También te quiero, Dae.

Ella sonríe correspondiendo mi abrazo.