Poemario - Luz y Oscuridad

Déjame ir

Alguna vez esto tenía un significado,
alguna vez había tenía algo de verdadero,
mas esta vez veo que no da resultado,
aunque no te ame, todavía te quiero.

Tantos recuerdos en estas paredes,
tengo que irme aunque te quedes,
tantos ecos felices resonando en el pasillo,
se perderán eternamente en este castillo.

No tiene caso salvar lo irreparable,
no tiene caso detener lo inevitable,
no tiene caso tratar de engañarte,
es por eso que he decidido soltarte.

Aunque duela es tu turno de aceptarlo,
sé que cuesta pero debemos enterrarlo,
siento que sostienes mi mano tan grácil,
créeme que si la sueltas te será tan fácil.

Déjame ir, sólo eso es lo que te pido,
es lo mejor por eso de ti me despido,
no hagas que esto sea más complicado,
lo que hemos pasado quedó en el pasado.

Déjame ir porque sólo nos haremos daño,
déjame sólo cruzar este último peldaño,
es doloroso pero tienes que entenderlo,
sí que me costó, pero tuve que hacerlo.

En un momento dejamos de funcionar,
no vimos a tiempo que esto iba a culminar,
ignoramos que se empezaba a fracturar,
hasta que vimos que ya no se podía reparar.

Si no somos felices, ¿por qué quedarnos?,
si no nos amamos, ¿por qué engañarnos?,
nos heriremos más aunque no queramos,
nos perderemos más si no nos dejamos.

De nada nos sirve alargar lo improlongable,
de nada nos sirve cargar lo insostenible,
con fuerza sostienes algo que ya no está,
con lágrimas retienes algo que ya se fue.

Aunque duela tenemos que terminarlo,
sé que cuesta pero es mejor así dejarlo,
siento que sostienes mi mano tan grácil,
créeme que si la sueltas te será tan fácil.

Déjame ir porque también me duele,
deja que mi camino me consuele,
acepta de una vez que nada es eterno,
acepta que sólo nos queda este invierno.

Déjame ir porque aquí ya no queda nada,
esta historia no está más que condenada,
suéltame antes de que sea esto más grave,
y sé que sabes que dejarme ir es la clave.

Déjame ir,
así como yo te dejé ir.