• Capítulo 2 •

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Ya había pasado una semana desde aquella noche

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Ya había pasado una semana desde aquella noche.

Después de ello, Kunikuzushi le preparó otra cama a Kazuha y se fueron a dormir. Por la mañana, el albino despertó con un buen olor y bajo a donde procedía el olor, acabando en la cocina. Kuni estaba haciendo el desayuno. A Kazuha le sorprendió aquello. Nunca pensó que ese chico cocinara, y menos que le saliera bien, pero después de probarlo supo que estaba muy equivocado.

Durante aquella semana, ninguno de los dos se dirigió la palabra. Alguna que otra mirada era vista entre ellos dos, pero no pasó de ahí, aunque ambos se querían hablar.

Aquel día Kazuha se dirigía para casa de Aether. Quería hablar con él y no le contestaba el teléfono, así que le preguntó a Lumine, la hermana gemela de Aether, si él estaba en casa. Ella le contestó que sí, pero que estaba solo y posiblemente la razón de por qué no le contestase fuese por estar jugando. También le dijo que podía ir a su casa, siempre era más que bienvenido.

Pico al timbre una vez que estuvo allí. Tardaron en contestarle, pero al fin, después de picar unas cuantas veces más, le abrieron la puerta.

—¿Kazuha?—preguntó el rubio al ver a su amigo allí. No entendía qué hacía allí.

—Aether, no me contestabas los mensajes y quiero hablar contigo. Tu hermana me dijo que estarías en casa.

—¿Has venido solo para hablar?—Dijo abriendo del todo la puerta y así dejarlo pasar.

—Sí, y porque Lumine me dijo que podía venir si quería.—habló mientras entraba a la casa y veía que Aether estaba un poco desaliñado, pero con ropa de salir, no de estar por casa.—¿Por qué…?—preguntó mirándole de arriba a abajo.

—Eeh… Quédate aquí, un momento.—dijo un tanto nervioso mientras subía las escaleras de la casa para entrar en su habitación y cerrar la puerta tras él.

No tardó mucho en salir de la habitación y bajar hasta donde estaba Kazuha, ahora sí, arreglado.

—Perdón por tardar, Xiao está en mi habitación. Ahora subo, tengo sed.—Kazuha subió por las escaleras mientras Aether se iba a por un vaso de agua.

Al entrar por la puerta, vio a Xiao en la cama de Aether con el móvil. Estaba con la espalda apoyada en la pared de color melocotón. Era la única pared con algo de color, las demás eran todas blancas con decoraciones que colgaban de estas.

Se saludaron y Kazuha se sentó al borde de la cama a esperar a Aether, aunque recordó que le había dejado hacía poco una chaqueta y aún no se la había devuelto, así que con toda la confianza del mundo, fue hasta el armario del rubio y rebuscó.

—¿Qué haces?—preguntó Xiao al notar que Kazuha estaba buscando en el armario de Aether.

—Tu novio me robó una chaqueta.

—Yo no te robe nada.—dijo el rubio apareciendo por la puerta y yendo hasta donde estaba el de pelo oscuro para sentarse a su lado.—Me lo dejaste, que es otra cosa.

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⏰ Laatst bijgewerkt: Feb 05, 2023 ⏰

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El chico de mis poemas || Kunikuzushi x KazuhaWaar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu