𝚛𝚘𝚜𝚊 𝚙𝚊𝚜𝚝𝚎𝚕 || 𝚋𝚘𝚗𝚡𝚋𝚘𝚗𝚗𝚒𝚎

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La chica le sonrió con un poco de vergüenza al pelimorado antes de salir corriendo tras su novio. Bonnie se quedó ahí, estático, intentando comprender aquel reciente encuentro mientras el escalofrío y sensación de calidez seguían instalados en su cuerpo. 

Diariamente convivía con un montón de personas, a quienes tenía con sonreír y tratar con amabilidad, jamás pensó que una de esas personas lograría que sus ojos brillasen en rosa, que le haría sentir una descarga eléctrica. Y mucho menos pensó que tal persona sería alguien con pareja. Entró de nuevo a los vestidores, ensimismado y con el rostro totalmente inexpresivo. 

-Fox...-El mencionado ni siquiera se esperó a que terminarse de hablar, pues le interrumpió de golpe.

-¡Sus ojos brillaron!-Bonnie asintió con la cabeza.-¡Encontraste a tu alma gemela! ¡Es increíble!-Se le notaba eufórico. El pelimorado sentía su cara arder de la vergüenza. No compartía la sensación de euforia de su amigo-¿Cómo se siente?

-En cuanto me acerqué a ellos el ambiente se aligeró. Cuando nuestros ojos se conectaron sentí un hormigueo por todo mi cuerpo, el tiempo se detuvo y me costó demasiado trabajo lograr quitar mis ojos de los suyos.-Fox lo observó con una sonrisa orgullosa, mientras sus ojos ámbar brillaban por la emoción.-Me han gustado varias personas a lo largo de mi vida, pero jamás había sentido algo así...-En grandes rasgos eso era lo que había sentido, pero realmente no podía poner en palabras lo que todavía no podía entender, así que simplemente se encogió de hombros.

-Ojalá yo encontrase a mi alma gemela.-Bonnie le sonrió con cariño. Sabía que el más alto estaba haciendo lo posible por tranquilizar el ambiente, y lo agradecía internamente. -¿Vas a ir a buscarle?-Bonnie negó con la cabeza, pensando lo vergonzoso que sería correr tras un chico de quien ni siquiera conocía su nombre. 

-Salió corriendo.-Mencionó con una ligera risita. Fox analizó la situación mientras rascaba su mentón en busca de concentración.

-Hombre, imagínate encontrar a tu alma gemela, sin previo aviso en una heladería... Salir corriendo me parece poco.-Bonnie rodó lo ojos.

-¡Yo también encontré a mi alma gemela, sin previo aviso en una heladería! - Fox río ante lo obvio, pero de nuevo volvió el tema a lo que era importante.

-Podría estar en el parque, hay uno no muy lejos de aquí... Tómate el día, yo te cubro.-el pelimorado trastabilló un poco ante la repentina amabilidad de su amigo.

-Quizás no esté...Además, venía con su novia.-Foxy le dio un leve golpe en el hombro.

-El alma gemela eres tú. Sé que quizás estás nervioso, pero debes intentarlo ahora que lo encontraste, no corras el riesgo de no volverlo a ver.

Bonnie pareció analizarlo por unos segundos y sonrió en grande. Se desató el delantal y lo dejó en las manos de su amigo para después salir corriendo. Fox lo observó con una sonrisa mientras se dirigía al mostrador, su turno había terminado, pero le haría el favor a su amigo... No todos los días encuentras a tu alma gemela. 

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Hola, hola, estaba muriendo por los exámenes de la uni, pero ya volví.

-Shion