Ditto (Meanie)

capitulo 7

Mingyu miro a sus amigos ridiculamente con sombreros de fiesta infantiles y de colores pastel —¡feliz cumpleaños Gyu! —gritaron sus mejores amigos —¡feliz cumpleaños a tí, te deseamos feliz!

Mingyu les cerro la boca ambos y comenzaron a reírse juntos —¡gracias chicos, ya perdí la cuenta de cuantos años hemos pasado juntos!

—los festejo desde que nacimos

Mingyu rodo los ojos y Soonyoung puso un cupcake con una vela frente a su cara —pide un deseó y sopla la vela

—pero cierra los ojos cuando pidas el deseó —termina Seungcheol

—bien —cerro sus ojos, junto sus manos y pidio su deseó. Los abrió y soplo la vela apagando la luz —¿como la encendiste?

Soonyoung subio sus hombros sin saber

Mingyu sintió un tacto en su hombro y dio media vuelta mirando a Wonwoo con una enorme sonrisa en su rostro

—¡vaya! Deseó expres —dijo Seungcheol mirandolos

Mingyu sabía que no iba a recibir un abrazo de Wonwoo estando enmedio del aula pero estaba muy equivocado. Sintió el abrazo calido de Wonwoo

—¿y esto?

—¡Feliz cumpleaños mi gigante Gyu!

—ah, muchas gracias —correspondio a su abrazo

Sus compañeros comenzaron a cantarle la cancion de cumpleaños y no le quedo de otra mas que agradecer

Wonwoo lo saco del salón y lo tomó del brazo para ir juntos hasta la biblioteca —¿a dónde vamos?

—tengo un regalo para ti

—tú no debiste hacer eso Wonie

—no, pero quería

Ambos llegaron y se encontraron frente a una caja forrada y Wonwoo corrio tomandola para darsela —abrela, miralo y amame

Mingyu la tomo, la dejo de lado y abrazo a Wonwoo sin remordimiento alguno besando su frente —yo ya te amo incluso sin este regalo

—pero se que te hará muy feliz

Mingyu miro los ojos esperanzados y termino por sentarse y abrir la caja. Dentro había otra caja y sus ojos se abrieron grandes, su corazón palpito con emoción y sus manos temblaron

—¿te gusta? Verdad que si, la escogí yo mismo, la compre con el dinero que gane del proyecto

—no tenias que gastar en algo tan caro y menos con el dinero de tu esfuerzo

—te amo Gyu —le abrazo y dejo un beso en sus labios —esto no es importante, tú felicidad si, tú me diste felicidad a mí, yo puedo darte un poco de lo mucho que me has dado

Mingyu le abrazo fuerte y abrio la caja sacando una camara de video

—ahora no solo necesitas un álbum de fotografías, ahora puedes ver tus momentos cuantas veces quieras

—nuestros momentos mi amor

—y los veremos todo siempre, en movimiento, nuestras risas, nuestros juegos. Todo

Mingyu sonrió mirando a Wonwoo. Volteo mirando hacia todos lados y le abrazo por la cintura para besarle en los labios con discreción y paciencia. Ese sin duda era el mejor momento de su vida y probablemente el mejor regalo que alguien pudo darle en sus dieciocho años un seis de abril

El alto comenzó a grabar a Wonwoo atendiendo una llamada con su mejor amigo que estaba en Estados Unidos

La cámara captaba cada buen momento y angulo. Wonwoo estaba sentado en el escritorio de la solitaria biblioteca con el teléfono en su oreja izquierda y su mano jugueteando con el resorte del teléfono enroscandolo en su índice