La voz de Bu Fang resonó débilmente entre el cielo y la tierra.
¡Tan pronto como resonó su voz, un rayo explotó en el cielo! Finalmente, el rayo púrpura ya no pudo contenerse y se derrumbó.
Un dragón celestial púrpura cayó, haciendo que el aire se evaporara en un instante, como si estuviera a punto de explotar.
El poder de este rayo fue tan fuerte que hizo sentir a todos como si hubiera llegado el fin del mundo.
Las pupilas del Hada Empírea se encogieron.
Este rayo la asustó un poco.
Sin embargo, a ella no le importó demasiado. Después de todo, este castigo de trueno no estaba dirigido a ella.
El rayo se acercó a Bu Fang.
El Hada Empírea miró a Bu Fang con indiferencia. "Ni siquiera puedes protegerte a ti mismo, y aun así te atreves a ser tan arrogante..."
¡Estaba decidida a mantener a esta bruja como su sirvienta!
Swoosh…
La punta de su pie dibujó un círculo en el aire.
Entonces, el Hada Empírea salió disparada y se retiró a la distancia.
Bu Fang miró al Hada Empírea que se retiraba y no la persiguió.
De pie sobre la espalda del pájaro Kun, levantó la cabeza y miró al dragón púrpura que parecía traer el fin del mundo.
Este fue el castigo del trueno del plato.
Sin embargo, Bu Fang frunció el ceño.
Este castigo de trueno fue... extraño.
Era demasiado fuerte. Comparado con la Llama Divina que quemó al pavo real, el poder de este castigo de trueno era demasiado fuerte.
¿Será que la existencia en la Tierra le estaba advirtiendo de nuevo?
Cada vez que cocinaba algo delicioso, aparecía una advertencia.
Y esta vez, usó directamente un rayo para advertirle. ¿Era esta la advertencia final?
Bu Fang frunció el ceño.
El Sistema le había dicho que había una crisis en la Tierra para él.
El despertar de dioses e inmortales de otros universos podría no ser la principal crisis para él.
La crisis que el Sistema había mencionado muy bien podría nacer en la Tierra.
Bu Fang respiró hondo.
Levantó la mano.
Apretando su Taotie Arm, lanzó un puñetazo hacia el cielo.
El Hada Empírea se burló.
Como existencia de los antiguos mitos y leyendas, tenía un fuerte control sobre los rayos.
Como experta al nivel de un Emperador Inmortal, naturalmente podía ver el terrible poder contenido en este rayo.
¿Este demonio realmente planeó usar su cuerpo físico para resistir?
¡Este fue el castigo relámpago de un Emperador Inmortal!
Como mínimo, debería usar un tesoro mágico para resistirlo, ¿verdad? Si usaba su cuerpo físico para resistirlo, lo más probable es que la tribulación del rayo lo hiciera añicos.
Justo cuando el Hada Empírea estaba prestando atención a esta escena...
En la distancia.
Erlang Shen, que sostenía al perro negro, entrecerró los ojos.
