✞ Light contra L ✞

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El caso Kira ha terminado, pero la fuerza especial continúa trabajando. Aún hay cosas qué resolver después de haber resuelto el caso, como qué harían con las libretas y cómo harían para regresar al mundo a la normalidad después de tantos años en desgracia. Light nunca recuperó sus memorias, tampoco Misa. El caso quedó resuelto porque finalmente terminaron por atrapar a los Kira que quedaban y como no tenían evidencia de que Light hubiese sido Kira alguna vez él seguía siendo libre junto a su ex novia. Sí, ex novia. Ahora que no había nada que los forzara a estar juntos Light había puesto una orden de restricción en su contra después de sus múltiples encuentros por seguir con él, y L había cambiado la ubicación del cuartel de cualquier manera, para estar seguros. Como sea, ya que las cosas se tranquilizaban, era el momento perfecto para que Light te confesara sus sentimientos y te pidiera ser su novia. Solo había un problema, el mismo de siempre, L. 

Todos en el cuartel sabían que esos dos tenían sentimientos hacia ti, excepto tú. Quizá L no era tan platicador y coqueto como Light, pero sus ojos brillaban de una manera distinta cada vez que te veía, y eras la única persona con la que hasta la fecha no le molestaba compartir sus dulces. Esa tarde tú estabas en la cocina hablando con Watari sobre tus planes para viajar a Inglaterra en el verano, y el resto del equipo estaba preguntándole a Light por qué se había una colonia tan particularmente masculina ese día.

—A decir verdad, estaba pensando en pedirle a (T/N) que saliera conmigo hoy después del trabajo —contestó.

L lo miró de reojo desde su silla, rodando los ojos al escuchar el apoyo que recibía de sus empleados. Light podía tener a cualquier mujer que él quisiera, pero tenía que elegir a la suya. Bueno, claro que aún no salían, y sabía que no tenía ningún derecho de estar celoso, pero estaba perdidamente enamorado de ti y no dejaría que nadie, sobre todo Light, saliera contigo. Le daba miedo esa parte de sí mismo, pero te conocía desde hacía tiempo y no había podido evitarlo. Tendrías que estar soltera, o ser suya si querías mantenerlo en tu vida.

—No creo que sea buena idea, Light —dijo L, no pudiendo quedarse callado.

—¿Qué? ¿Por qué no? —preguntó incrédulo.

—Ella no es tu tipo de mujer —L se encogió en hombros. Sabía que lo eras. Tú eras el tipo de mujer para cualquiera. Eras perfecta, pero él quería bajar la autoestima de su rival.

—¿De qué hablas, Ryuzaki? —interrumpió Matsuda—. (T/N) es exactamente el tipo de persona con la que saldría Light. Ambos son inteligentes, atractivos, tienen la misma edad y se ríen siempre que están juntos.

—También soy inteligente, atractivo, apenas soy un par de años más grande que ella e incluso cuando no es mi intensión hacerlo la hago reír más a menudo que nadie —se defendió. 

De hecho, había contado todas las veces en que te había hecho reír. Te gustaba reírte cuando jugaba con su comida o tomaba bocados tan grandes de sus postres que le quedaba betún o migajas en la comisura de los labios. Se la pasaban muy bien juntos.

—¿Estás diciendo que ella te interesa? —Light alzó ambas cejas.

—Sí, a decir verdad, ella es el tipo de mujer más adecuada para mí.

—¿Y qué te hace decir eso?

—Bueno, para empezar, ella no necesita preocuparse de que otras mujeres me busquen para conquistarme.

—Quizá eso sea cierto, pero creo que el hecho de que pueda estar con cualquier otra mujer y la elija a ella hará que termine por enamorarse de mí, ¿no crees? —Imagay tenía un punto.

—Soy el mejor detective del mundo —se quejó L—. Los mejores tres, te recuerdo. Jamás ha existido un caso que no pueda resolver. Yo soy la justicia.

—Sí, y todas esas cosas son geniales, pero es justamente tú trabajo lo que te impide tener una relación como esa. No puedes darle la atención que se merece.

—Eres policía —se burló L—. No es como que tú puedas ofrecerle algo mejor.

—Hey, ya basta. Estoy seguro de que (T/N) estará de acuerdo con que ambos son un buen partido —añadió Matsuda.

—Cállate, Matsuda —dijeron Light y L a la par.

—Estaría dispuesto a dejar la policía por ella —dijo Light.

—Por favor, estarías dispuesto a matar por ella —L se levantó de su silla, enderezándose de su postura normalmente encorvada para quedar a altura de Light—. Yo hago del mundo un lugar mejor para que ella pueda tener la vida que se merece.

—Ya hacías del mundo un lugar mejor porque decidiste convertirte en detective.

—Eso fue antes de conocerla. Ahora tengo un motivo más allá de mis intereses personales.

—Me visto mejor que tú —dijo Light.

—Le gusta más mi cabello que el tuyo —se defendió L.

—Le gusta llevarse mi chaqueta cuando hace frío —contra atacó Light.

—Soy más fuerte que tú.

—Eso está por verse —dijo Light, alzando el puño.

Se agarraron de la camisa, ambos con el puño alzado, mirándose con desprecio. Tú entraste a la habitación confundida, observándolos antes de reírte y burlarte de que se peleaban por todo. Pero rápidamente te diste cuenta que no era como siempre, la tensión aún no se desvanecía y ambos te estaban mirando más de lo normal.

—(T/N) —te llamó Light—. Me preguntaba si quisieras ir a tomar algo después del trabajo.

—No puede hoy —contestó por ti L—. Necesito que se quede conmigo arreglando unos papeles.

—No, no es cierto —gritó Light—. Solo no quieres que salga conmigo porque sabes que la vas a perder.

—Pero, ¿de qué rayos están hablando? —preguntaste confundida.

—Ambos quieren salir contigo —aclaró Matsuda.

—¿Y acaso no cuenta lo que yo diga?

—Eso depende —dijo L—. Si dices que no saldrás con ninguno de los dos, lo que es probable considerando tu personalidad dulce y atenta, entonces no me interesa lo que tengas que decir, porque sé que será una mentira para no lastimarnos. Si estás dispuesta a decirnos a quién eliges realmente, entonces claro que me interesa. 

—Bien, elijo a L —te encogiste en hombros. Escuchaste cómo todos ahogaban un grito en sorpresa—. ¿Qué?

—Eso fue sorprendentemente rápido —dijo Aizawa.

—Entiendo, es porque fui sospechoso en la investigación, ¿no es así? —dijo Light, con la cabeza gacha.

—No, es solo que siento una conexión con L que no había sentido con nadie más —admitiste. 

—Vamos (T/N) estás entre amigos, es porque es rico, ¿verdad? —se burló Matsuda.

—¡Matsuda! —lo regañaron todos al unísono.

—Tengo mi propia fortuna —nadie lo sabía, no había sido necesario, pero habías aprendido a invertir cuando tenías catorce años y te habías convertido en millonaria solo cuatro años después.

—Supongo que no hay una buena razón para quedarme aquí después de todo —murmuró Light para sí mismo, tomando sus cosas antes de acercarse para darse un abrazo—. Gracias por todo, (T/N)

—Light, por favor. Solo porque no te vea de esa manera no es motivo para terminar las cosas así —intentaste ir detrás de él, pero sentiste que L tomó tu mano, con sus ojos brillando al ver que había ganado.

—Déjalo. Ya regresará —te jaló hacia él, dejando a los demás sorprendidos antes de tomarte del mentón y alzar tu barbilla, acercando sus labios a los tuyos—. ¿Acaso van a seguir observando? Me están poniendo incómodo.

Pero no les importó, no se voltearon. Esperaron a que te besara, finalmente apartando sus ojos de ustedes cuando intensificaste el beso tomándolo de la nuca y acercando su rostro aún más. Definitivamente habías hecho la elección correcta. 

One-shot: L y túWhere stories live. Discover now