Survive For Me | Volturi Kings [Trad]

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Capítulo 10: Mentalmente inestable

"Impresionante" murmuré distraída mientras veía a Félix derribar a la mayor parte de la guardia con solo unos pocos golpes

"Felix es el más fuerte en nuestra guardia y el más letal" ronroneó Caius en mi oído mientras veíamos a Felix derribar a todos los miembros de la guardia que se pararon frente a él. "Por eso, mi amor, es tu guardaespaldas, ningún vampiro puede igualar su fuerza o sus habilidades"

Continué viendo a los guardias pelear entre ellos, entrenándose

Echando un vistazo al otro lado de la gran sala, vi lo que parecían ser un niño y una niña parados y mirando a los guardias pelear. La chica de cabello rubio recogido en un moño apretado y limpio, miró a sus compañeros de guardia con una mueca de desprecio en su rostro, mientras que el chico de cabello castaño parecía disfrutar viéndolos pelear, a juzgar por la sonrisa en su rostro

"¿Quiénes son?" Le pregunté a Caius. ¿Por qué sus hijos estaban aquí? Caius me había informado con tanto cariño que se aseguró de que solo los mejores de nuestra especie fueran elegidos para servirlos y protegerlos y bueno, ahora a mí

Caius sonrió, envolviendo su brazo alrededor de mi cintura atrayéndome hacia él, a pesar de la mirada que le lanzaba "Esos son Alec y Jane, nuestros mejores guardias. Jane tiene el poder de inducir una ilusión de dolor en cualquiera que ella elija, es bastante entretenido de ver en realidad".

Levanté una ceja hacia él. Aro y Marcus me advirtieron que Caius era un poco sádico, pero no sabía cuánto hasta ahora

"¿Y qué puede hacer Alec?" Murmuré mientras continuaba mirándolos. Al oír su nombre, el chico me miró. Nos miramos el uno al otro durante unos segundos antes de que la comisura de sus labios se curvara hacia arriba en una sonrisa amable, antes de redirigir su atención al hombre que Félix había golpeado tan a fondo hasta ahora, sacudiendo la cabeza con decepción

"Alec puede cortar todos y cada uno de tus sentidos, es muy útil en una pelea"

"Apuesto a que sí" murmuré distraídamente mientras el guardia continuaba entrenando

Caius comenzó a mordisquear mi cuello, besando mi punto de pulso antes de morder suavemente mi carne, sonriendo cuando me puse rígido por la sorpresa. Había al menos una cosa que sabía sobre Caius, no era sutil ni paciente

Aclaré torpemente mi garganta antes de, con gran dificultad, salir del abrazo de Caius. Por mucho que me atrajera, no quería que se repitiera esa situación horriblemente incómoda en la que me había metido con Aro