Desenrascanço

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Disclaimer: Los personajes de Naruto son propiedad de Kishimoto. La historia es de El Reino.

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Día 4: Desenrascanço (portugués)

"Encontrar una forma inesperada e inusual de resolver un problema"

—¡Eh! ¡Hinata-chan! —gritó una voz femenina detrás de Hinata.

Hinata se detuvo y luego maniobró torpemente su pie malo para poder girarse. Unos pasos se acercaron a ella.

—¡No, yo voy, ten cuidado! —dijo Sakura. La otra mujer se adelantó para poder inclinarse hacia Hinata—. Lo siento. No quise hacer que te detuvieras.

Hinata sujetó la muleta entre su brazo y su cuerpo, y señaló la vía que tenían delante. Este rodeaba toda la aldea. No se permitía usar armas allí, ya que muchos civiles utilizaban ese camino como un bonito sendero para pasear. Sin embargo, debido a su proximidad a algunos campos de entrenamiento, muchos shinobi lo empleaban como pista para correr y calentar.

—Por eso estoy aquí —explicó Hinata—, para practicar.

Sakura hizo una mueca.

—¿Cuánto tiempo las necesitas?

Hinata siguió avanzando, asegurándose con mucho cuidado de que su pierna lesionada quedara perfectamente orientada hacia el frente. Sakura caminó hacia atrás, al compás de los movimientos de Hinata.

—En un par de días, se me permitirá llevar solo una muleta.

—Qué bien. ¿Y luego por cuánto tiempo vas a precisar de una sola?

—Dos semanas. Pero después estaré por tres meses de baja médica.

—¿Tres meses? —exclamó Sakura.

Levantó las manos para agarrar los hombros de Hinata y sacudirla. Al darse cuenta de su error, se apartó tan rápido que Hinata pudo oír el sonido de las mismas cortando el aire. Sakura se llevó las manos a la espalda.

Le dio una tímida sonrisa.

—Lo siento. Es solo. Tres meses. ¿No estás bromeando?

Hinata negó. Tsunade decidió que la baja médica sería una tapadera. Si la información se filtraba de alguna manera, entonces tal vez podrían identificar a la entidad que apuntaba al Equipo 8. Pero a Hinata le llevaría mucho tiempo recuperar la funcionalidad de su pierna. Los músculos de su pierna ya estaban un poco atrofiados. Si Hinata flexionaba los músculos del cuádriceps, podía ver la diferencia entre el fuerte y sano y el más delgado y dañado.

—¿Has hablado con Sasuke? —preguntó Sakura—. Él te trajo y se pone muy protector con sus pacientes, aunque nunca lo admitirá. Estoy segura de que podría encontrar una manera de que te mejores.

Hinata inclinó la cabeza hacia un lado y se arrepintió cuando el movimiento le hizo perder el equilibrio. Se tambaleó peligrosamente. Sakura se apresuró a estabilizarla.

—Gracias —Hinata se rio—. Supongo que no puedo hacer eso al caminar.

—¡No me digas! ¿Estás bien?

—Estoy bien —Hinata palmeó el brazo de Sakura—. Iba a preguntar que qué querías decir con lo de Sasuke. Yo... —trató de elegir sus palabras con cuidado—. Nunca pensé que Sasuke se convertiría en un ninja médico. Porque...

—¿Por sus modales? —Sakura terminó con una sonrisa de satisfacción.

—¿Es grosero que lo diga?

Todo el mundo resplandeceWhere stories live. Discover now