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— Uhm… ¿Qué…?

Marcy despierta, luciendo claramente desorientada y ajena a su alrededor.
Pesadamente intenta abrir los ojos, pero la repentina iluminación la sofoca y la obliga a cerrarlos
de inmediato.

Con los ojos entrecerrados, Wu observa lo que puede y trata descifrar lo que está sucediendo.

Nota que está en un calabozo, lleno de mugre, polvo y rastros de moho por las esquinas más
oscuras; el suelo de piedra es frio y áspero que siente como raspa sus brazos y piernas descubiertas.

La poca iluminación que hay es de una antorcha clavada en una de las paredes; no hay alguna
ventana o abertura que le de una señal de la hora o el lugar en el que se encuentra.

Por más que trata, no puede reconocer este lugar, o cualquier otra cosa; siente un fuerte dolor en la
cabeza que le impide pensar con claridad.

Era como si alguien la hubiera noqueado, pero no recuerda nada de eso.

— Hey Mar-Mar —de repente se oye una voz vacilante y muy familiar al otro extremo de la
habitación— Al fin despiertas.

La silueta da unos pasos al frente, y la pequeña azabache parpadea repetidas veces para poder visualizar mejor.

Una vez que su vista se acostumbra, abre los ojos sin poder creerlo.

— ¿S-Sasha…? —tartamudea, con una mueca aterrada.

La susodicha se ve divertida, y con una sonrisa le responde— La misma—Es entonces cuando Marcy entiende la gravedad de la situación.

Desesperadamente intenta levantarse pero es en vano, sus muñecas y pies están amarrados firmemente con una soga que la mantiene en el suelo; aún así, la omega forcejea con pavor, sintiendo el pánico apoderarse de ella cada que Sasha se acerca con pasos lentos y confiados.

Lo único que puede hacer Wu es arrastrarse lo más lejos que puede, hasta chocar contra la pared.

— ¡¿Qué hago aquí?! ¡¿Qué está pasando?!

— No te esfuerces hablando, linda. Solo quédate quieta y si tienes suerte no saldrás lastimada.

— ¡Desátame! —exige, intentando disimular su miedo. No piensa en darle el gusto a la rubia de verla indefensa, aunque ya era un poco tarde para eso.

Sasha sigue sonriendo, como si ver a la contraria en ese estado le causaría satisfacción, lo cual era acertado

— ¡No puedes hacer esto! ¡Te ordeno que me sueltes!—

Sasha se agacha, quedando casi a su altura. Solo hace falta una mirada para intimidar a la pobre, quien se ve obligada a mantener silencio— Ahora estás bajo mi control. —dice tomando un acento más serio— Mi reino, mis reglas. Tu ya no tienes autoridad acá.

— ¡Teníamos un trato-!
Su breve carcajada interrumpe a la chica— No puedo creerlo ¿Enserio pensante que me detendría por un estúpido trato? —la contraria frunce el ceño, sin ser capaz de responder—Como adoro tu ingenuidad Marcy...—

La omega se siente realmente frustrada y decepcionada. No recordaba que Sasha fuera tan cruel en el mundo humano; claro, tenía sus momentos, pero jamás intentó amarrarla y retenerla en contra de
su voluntad en un sucio calabozo lleno de insectos.

Sasha la quería, la cuidaba, y cuando llegó a Amphibia se aseguro de protegerla a ella y a Anne.

Hasta que los desacuerdos comenzaron, el conflicto se hizo muy grande, y la "partida" de Boonchuy hizo que aceptara finalmente la clase de persona que era Waybright.

𝙸 𝙳𝙸𝙳𝙽'𝚃 𝚆𝙰𝙽𝚃 𝚃𝙷𝙸𝚂.... (sasharcy/Omegaverse) Where stories live. Discover now