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Llevo lo que parecen siglos tras la muerte, vi cómo mi cuerpo se hundía hasta desaparecer y lo próximo fue la oscuridad, la aterradora oscuridad, la oscuridad que te hace temblar y llorar, tiritar y gritar, el pánico es la única sensación aquí, no eres nada, pero eres consciente de ello, eres consciente de que no eres nada y de que nada te rodea.
"Lik" escucho cómo Neteyame me llama "Lik" es como si estuviera muy lejos.
Sigo su voz, sigo esa preciosa voz, me agarro a ella y la busco despertada por salir de este horrible lugar.

Abro los ojos, el rostro de Neteyam está a centímetros del mío, las lágrimas corren por sus mejillas mientras sus labios se unen a los míos para proporcionarle aire a mis pulmones.
Aprieto fuertemente el brazo con el que me rodea, aparto la cabeza y escupo una cantidad inmensa de agua.
Respiro ansiosa y toso a la vez.
—Lik— escucho la voz quebrada y aliviada de Neteyam.
Convulsiono hasta que mi cuerpo se acostumbra a respirar de nuevo.
Fijo los ojos en los de Neteyam y rompo a llorar en silencio, lloro aterrada, lloro porque ya no estoy en ese lugar frío y oscuro, lloro porque sé que algún día volveré allí.
Neteyam me abraza aún llorando y susurra —no me vuelvas a dejar Lik por favor— suplica —no me dejes otra vez— siento el fuerte y acelerado latido de su corazón en mi pecho.
No puedo contestar, no tengo fuerzas para hacerlo, siento una punzada de dolor en la mejilla, hago una mueca y Neteyam la ve.
—tienes una pequeña herida— dice mientras se seca las lágrimas y recupera la compostura —yo te la curaré— sonríe de lo más triste.
Cierro y abro los ojos sin poder responder aún, todos me miran, Tsireya, Kiri, Tuk, Lo'ak, Rotxo, Neteyam y..., y nadie más, Aonung no está.
Reúno toda la energía que tengo e intento hablar.
—p, p, pa, paya, paya— trago saliva sin poder continuar.
—¿Payakan?— trata de adivinar Neteyam.
—s, sí— respondo.
—Payakan— dice con cierta ira —Payakan te atacó— me informa.
—lo sé— susurro —d, d, don, dónde está— pregunto preocupada.
—no volverá a hacerte daño— afirma —no tienes que preocuparte— me intenta calmar.
—ayu, ayuda, ayúdale— apenas tengo fuerzas.
—tiene delirios— dice Kiri preocupada.
—cállate Kiri— toso tras decir una frase completa.
—no son delirios— añade Neteyam sonriendo.
Hasta ahora no me había dado cuenta de en dónde estoy, veo que estoy en los brazos de Neteyam sobre una superficie en medio del mar, un segundo, ¿en medio del mar? esto no es una superficie ¿verdad?, ¡estamos encima de payakan!, Oh mierda, esto se va ha poner feo.
Trato de levantarme, pero Neteyam me lo impide.
—no te— se corta a sí mismo —ten cuidado— me ayuda a incorporarme.
Me acuerdo de la discusión que tuvimos antes de que me fuera con Lo'ak y me doy cuenta de por qué no me ha prohibido levantarme.
—estoy bien— afirmo bajito.
—lo dudo— responde.
—necesito sales de amoniaco— digo para todos.
—sales de qué— repite Lo'ak confuso.
—sales de— me callo cuando veo cómo Aonung sale del agua apurado.
—Joder Lika— veo su cara de alivio mientras viene y me abraza —menudo susto me has pegado— se separa y veo sus ojos llorosos, sé que está de lo más preocupado y admiro que lo disimule tan bien.
—¿a dónde habías ido?— le pregunta Tsireya un poco enfadada.
Aonung abre la boca para contestar, pero Neteyam responde primero.
—a por sales de amoniaco—
Me doy la vuelta y sonrío débilmente —cuánto me gustas—
Neteyam sonríe al escucharme.
—ten— dice Aonung dándome el pequeño frasco de sales que Neteyam le pidió traer.
Abro el tarro —odio hacer esto— me acerco el bote a la nariz e inhalo entre seis y siete segundos, parece poco, pero es muchísimo.
Suelto un gemido cuando todo mi cuerpo se activa.
Levanto la cabeza y cierro el bote.
—payakan tiene un localizador— suelto sin perder el tiempo.

Todos me miran sorprendidos.
—de qué coño hablas Lika— dice Lo'ak asustado.
—antes de que me ahogara— Payakan suelta agua y nos salpica a todos, me lo tomo como una disculpa —lo vi clavado en su lomo—
—mierda— dice Neteyam.
Me tiro al agua y nado hasta el lugar en el que Payakan tiene el localizador clavado.
Los demás saltan y me siguen.
La herida escuece al contacto con la sal del mar, es doloroso, pero me ayudará a mantenerme despierta.

Llegamos a la parte inferior del animal.
—hay que bucear— digo un tanto asustada.
—no hace falta— no termino de escuchar lo que Neteyam iba a decir cuando me sumerjo.
Lo'ak y yo llegamos los primeros, le miro y asiente, agarramos el localizador y tiramos de él, se me escurre de las manos, vuelvo a agarrarlo y esta vez clavo las uñas en él, Lo'ak también lo agarra, tiramos todo lo fuerte que podemos, el agarre es estable, pero no conseguimos sacarlo, siento un cuerpo a mi espalda y giro la cabeza para ver quién es.
Neteyam me rodea y agarra el localizador, me ayuda a tirar, pero no conseguimos sacarlo, le hago un gesto a Lo'ak y a Neteyam para que subamos a respirar.
Cuando salimos Tsireya, Kiri, Tuk, Aonung y Rotxo estaban a punto de sumergirse.
—no hemos conseguido sacarlo— les informa Lo'ak preocupado.
—tiene que haber una forma— dice Kiri pensativa.
—ley de causa y efecto— hablo para mí misma.
—¿de qué hablas Lik?— pregunta Neteyam.
—ley de causa y efecto— veo sus caras de desconcierto —toda causa tiene su efecto y viceversa— explico entusiasmada.
—¡No te entiendo Lika!— exclama Lo'ak frustrado.
—escúchame bien, no tenemos mucho tiempo, la gente del cielo vendrá, así que prestad atención— comienzo —la ley de causa y efecto dice que toda energía empleada es devuelta, eso quiere decir que jamás conseguiremos sacarle el localizador—
—eso ya lo sabemos— me interrumpe Lo'ak.
—¡escúchame!— exclamo y continuo —la ley de la vibración dice que todo debe cambiar, y la ley de correspondencia que para que algo cambie, la forma de verlo debe hacerlo también— les miro mientras sonrío contenta de haber encontrado la solución.
Lo'ak me mira confuso y Neteyam parece estar disfrutándolo.
—no habéis entendido nada ¿verdad?— deshago mi sonrisa lentamente.
—¿a ti te parece que lo he entendido?— responde Lo'ak nervioso.
—a mí me ha gustado, ha sido sexy— opina Neteyam.
Kiri suspira al escuchar el comentario de Neteyam
—hay que enganchar el localizador y que payakan sea el que tire— digo de forma más sencilla.
—¡claro!— exclama Lo'ak como si hubiese sido idea suya —lo engancharemos en unas rocas y payakan tirará, él hará la fuerza— repite con otras palabras.
Sonrío al ver que por fin lo entiende.

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Os pillé jajajajaja creíais que Lika había muero ¿verdad? bueno, ya veis que es una tía dura.
Ya hablando sobre el capítulo de hoy, gracias a este capítulo sabemos que el mayor fetiche de Neteyam es ver a Lika hablar científicamente jajajajaja es broma, o no  jajajaja, y lo mejor es que no se enteraba de nada porque Lo'ak al menos lo intentaba.

<3

¿Qué soy? (Avatar 2 el camino del agua )Where stories live. Discover now