Cinco: "¡Te gusta!"

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Momo era como una paleta pegajosa, no, era como un chicle. ¡Sí! ¡Esa era la palabra que Nayeon buscaba! Momo era como un chicle permanentemente pegado a su lado.

Siempre con lo pegajosa que es le hace saber que está a su lado, nunca quiere despegarse de ella. ¡Es jodidamente tierna! ¡Pero no! No está enamorada de ella. No, claro que no.

Y Jeongyeon no le dirá lo contrario.

Jeongyeon casi no habla y cuando lo hace Nayeon siempre la escucha atentamente porque sabe que eso le gusta a su amiga, pero ahora solo quiere callarla.

- ¡Te gusta! - es que Jeongyeon no hablaba, sino que gritaba y eso ponía paranoica a Nayeon - ¡Te gusta, te gusta, te gusta! - parece recalcarselo a cada rato y Nayeon no evitó abalanzarse hacia ella.

Se subió en ella y tapó su boca, estaba más que furiosa, estaba avergonzada. Pero no aceptaría tal cosa, tal comentario, tal mentira.

- Callate, Jeong. Estoy considerando si me caes mejor callada - dijo mientras que Dahyun entraba a la habitación con un plato con panqueques que hizo la señora Im, mamá de Nayeon.

Nayeon agradecía que sus amigas no muestren su relación cuando están en casa suya, no quisiera pasar vergüenza y regaños o reclamos de traer lesbianas a casa.

- ¿Por qué te quieres cojer a mi novia, Im? - Dahyun preguntó fingiendo enojo cuando cerró la puerta y vio a ambas chicas en el suelo.

- Besala, muerdela, cojetela pero callala de alguna forma, Dahyun - suplicó la mayor poniendo más atención al plato de panqueques que a su propia súplica - ¿Mama me mandó alguno?

- Sí, son para las tres - Dahyun dejó el plato en la cama para luego ver como Nayeon se levantaba de inmediato a comer. Jeongyeon se quedó viendo el techo mientras seguía en el suelo, cansada, ¿de qué? Ni se sabe - Yon, si no vienes me voy a comer le tuyo - pero no lo suficiente cansada como para no obedecer que su novia - ¿De qué hablaban?

- A Nayeon le gusta Momo - Jeongyeon se apresuró a decir ganándose un pedazo de panqueque en la mejilla - Ahh - dió un gritito por el arrebato repentino.

- No. Me. Gusta - recalcó Nayeon - Punto - finalizó enfatizando con un dedo.

- Y seguido. Te gusta, la negación es el primer paso - Jeongyeon la copió enfatizando con su dedo.

- No, no lo hace. No es negación, es afirmación de que no me gusta - eso no se lo creían ninguna de sus dos amigas, solamente no era creíble el como miraba la puerta nerviosa y sus palabras no eran seguras - Deja de decir tal estupidez.

- En realidad, se ve que sí te gusta - Dahyun se metía, teniendo las mejillas rellenitas de su panqueque. Nayeon la miró indignada, ¿ella tampoco le creía? - Te conocemos, no tienes que negarnos algo a nosotras cuando sabemos todo sobre ti. Tampoco es como si te juzgaramos, Nayeon - la mayor aún así negó, totalmente terca a no aceptar aquello.

Dahyun solo pudo suspirar mientras que Jeongyeon volvió a silenciarse y comer.

- No me gustaba, no me gusta y no me gustará. Son mis cosas, yo sé lo que siento y no me gusta ella - aseguró terminando lo que quedaba en el plato, parándose y sentándose después en la silla giratoria que estaba delante de su mesa donde estudia.

- Si no te gustara, no estarías tan devota a decir que no te gusta. Ni siquiera te ves disgustada, solo temerosa - cuando Dahyun dijo aquello, Nayeon cambió su semblante al darse cuenta de la expresión asustada que tenía, la cambió por una enojada y solo calló - No te castigues así, Nayeon - fue lo que dijo para luego sacar su celular y empezar a jugar en su celular.

Nayeon le siguió a su acto, empezando a jugar en su computadora.

Jeongyeon, pues... siendo Jeongyeon, se acostó en la cama y miró el techo con expresión curiosa hasta quedarse dormida, muy tranquila.

Muy tranquila para el gusto de Nayeon, quien la envidiaba porque desde hace días no ha podido dormir mucho.

La envidia la recorre que pone un poco de música alta. Minutos después, se enojó y salió de su habitación cuando Jeongyeon parecía hasta feliz entre sueños por la música.

Dahyun rió viéndola irse mientras que Jeongyeon felizmente dormía, probablemente bailando en sus sueños.

O entre pesadillas, no se sabrá. Para Jeongyeon es lo mismo.

CLÓSET ; NAMOWhere stories live. Discover now