CLÓSET ; NAMO

Once: Saber del beisbol.

Nayeon se encontraba, muy milagrosamente, en las gradas del campo de la preparatoria. Si eso no lo veía Dahyun, probablemente no lo creería, porque se encontraba viendo muy atentamente a todo lo que era Hirai Momo.

Era otro día, en la mañana. Momo jugando béisbol junto a sus compañeros. Chaeyoung y Mina eran quienes la estaban apoyando en otras gradas, junto a algunos admiradores del deporte que también reconocían a Hirai como buena jugadora, tanto para batear como para atrapar.

Mientras Nayeon estaba alejada, con un suéter tapandola casi entera, sus codos en sus rodillas, sus manos en su rostro, casi echa un ovillo, solo faltaba encogerse más, pero estaba cómoda y mirada sin entender mucho al juego.

Había estado intentando descifrar de que se trataba con solo ver las jugadas, pero no lograba entender el por qué de cada cosa.

Afortunadamente, Momo no había topado con ella más que en su llegada a la preparatoria para darle una manzana verde, así que ahora estaba tranquila.

— ¡Hirai! ¡Te toca batear! ¡No seas tramposa! — una chica le dijo divertidamente a Momo.

Nayeon puso atención, logrando reconocer a Park Jihyo, solo la reconocía al ser una de las mejores en las asignaturas, pues tenían el mismo promedio casi siempre. A Nayeon no le molestaba, pero al parecer Park tenía ese hábito competitivo en todo, siempre queriendo ganarle, pero Nayeon lograba hacer que quedara en empate.

No encontraba una razón coherente para hacer ese pequeño juego silencioso, pero le entretenía ver como Park tenía su cara de frustración cada que recibían calificaciones a final del trimestre.

Claro, nunca se acercaría en ámbito amistoso, pues Jihyo era abiertamente homosexual y no soltera, y Nayeon realmente no quería problemas.

Bastante esfuerzo hizo con ir a las gradas a ver el juego de Momo.

¡Pero no entendía nada! ¡Estaba empezando a frustrarse!

Casi enojada y bufando, metió su mano en su bolsillo para sacar su celular y buscar en redes sociales qué mierda era el béisbol y cómo era que se jugaba.

Un sin fin de resultados parecieron, pero tomó el más claro y lo copió en portapapeles para leerlo cada que se le olvide. Alzó la mirada, rápidamente chocando con los ojos felices de Momo que ya la habían notado. Bajó rápidamente su mirada a su celular, no queriendo ninguna otra interacción entre ella y la tonta de Hirai.

Entonces se concentró en lo escrito.

'El objetivo del juego es golpear una pelota con un bate (batear), desplazándola a través del campo y correr por el campo interno de tierra (infield) buscando alcanzar la mayor cantidad de bases posibles hasta dar la vuelta a la base desde donde se bateó (home) y lograr anotar el tanto conocido como carrera, mientras los jugadores defensivos buscan la pelota bateada para eliminar al jugador que bateó la pelota o a otros corredores, antes que éstos lleguen primero a alguna de las bases o consigan anotar la carrera (véase Reglas para más detalles del juego).

El equipo que anote más carreras al cabo de los nueve (9) episodios, llamados innings (o entradas) que dura el encuentro, es el que resulta ganador. Si al término de las nueve entradas regulares persiste un marcador igualado en carreras, el encuentro se extiende cuanto sea necesario para que haya un ganador, según las reglas básicas del juego no existe el empate, permitido solo en ligas amateurs e infantiles para limitar el desgaste de los jugadores.'

Nayeon terminó de leer y empezó a querer entender cada cosa que había en el campo abierto, viendo que Momo ahora estaba con el bate. Ella tendría que batear y alcanzar la mayor cantidad de bases, lo mejor sería carrera.