VIII

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❝ Qᴜᴇʙʀᴀᴅᴏ. ❞

───¡Noooo! JAJAJA ¡Nooo!

───Sos un pelotudo, sos un pelotudo.

Las risas del Team adornaban la base, Rubius en busca de hierro para su puerta reforzada olvido que lo que tocaba se volvía así, ahora tenían un horno con contraseña por el despiste del híbrido pardo.
Obviamente las risas e insultos no paraban ni por un segundo, el ambiente relajaba a los jugadores, antes de muchas tragedias.

───Un horno con contraseña, que asco de vida. ───se quejo Rubius observando que si lo destruida el reforzador no se iba ───Bueno la contraseña de este horno es uno,uno,uno,uno,uno,uno.

Quackity lo miro perplejo ante tal contraseña, no sabía que incluso de estúpido para poner eso, sino que también va y pone la contraseña más obvia que existe en la vida.
Encima lo peor es que la contraseña no funcionaba, asique ahora el horno con contraseña estaba de adorno en la base, las risas de Shadoune y Missa se volvieron carcajadas ante el error del reforzador, Rubius quería morirse de vergüenza.

Después de las risas todos volvieron a sus tareas pendientes; Rubius con otro intento de una puerta reforzada, Missa con el huerto, Shadoune y Quackity ordenando materiales y objetos de los desordenados cofres, y luego Spreen, quien encantaba libros y sus herramientas para más protección y eficiencia a la hora de minar.

Spreen sonrió al ver su hacha con "Filo II", quería ver cuanto sacaba, observo a sus compañeros con una sonrisa traviesa, movía su cola animado y sus orejas lo acompañaban en el baile.
Se acercó lentamente a Quackity quien por alguna razón había quedado encima de algunos muebles, el pato sintió un escalofrío cuando observo como su compañero Spreen se acercaba a él con un aura que no parecía ser amigable, sino traviesa. Quackity incluso su cabeza confundido y agarro con firmeza su escudo.

───Quackityyy ───el nombrado sintió terror, todos se dieron vuelta viendo la confusa escena ───. ¿Serias tan amable de ser el sujeto de prueba para ver que tanto saca mi hacha encantada? ─── ni siquiera dudo, el pato empezó a negar con la cabeza rápidamente demostrando su miedo ───. Te doy una venda dorada. ─── Quackity seguía negándose.

───No hay PvP, Spreen, no hay forma que lo pruebes. ───Rubius menciono acercándose a él con una sonrisa, sus orejas se movían alegremente, algo que desánimo al azabache ya que no podía probar su hacha.

───¡Oh JAJA! ─── La risa de Quackity era dd alivio y a la ves de burla.

Todo estaba tranquilo, la estaban pasando bastante bien. Spreen estaba más relajado que de costumbre y más energético, era algo raro ya que siempre tenía cara de malhumor.
Quackity desde el mueble se lanzó hacia el híbrido azabache quien se asusto pero logró agarrarlo, este lo miro con burla y Spreen lo dejo caer de sus brazos. Las risas no faltaron, pero estas mismas fueron interrumpidas por una voz, que a ninguno le gustó escuchar.

───Hola..

Spreen levanto sus orejas alerta, ni siquiera tenía que darse vuelta para saber a quién le pertenece esa voz que empezó a odiar esa noche. Sus ojos se oscureciendo, salió junto a Shaodune de la casa quien se había puesto alerta al reconocerla también.

───Jokki... ─── musito Rubius con desagrado al verlo llegar despacio a la base.

───Hola, hola. Soy yo, no me mateis ───imploro cuando observo a Spreen salir serio.

Corazón frío | SpreenWaar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu