Otro papá - Sookai

6. Recuerdos dolorosos

El camino a casa no fue largo, cómo siempre Soobin reproducía las canciones favoritas de Soyeon por la bocina del carro mientras ella jugaba con su conejito de peluche como siempre lo hacía, Soobin sonrió en grande al ver a la pequeña divertirse con el conejito, adoraba verla feliz y más ahora que su peluche apareció, todo estaba más que bien, pues Soyeon no lloraría esa noche o al menos no iría hasta su cama para pedirle dormir con él.

Porque sí, a los ojos de Soyeon su padre parecía un gran conejo, así que en lugar de abrazar a su conejito lo haría con su papá, a Soobin le causaba gracia está situación, pues recuerda la madre de Soyeon le decía lo mismo cuando eran jóvenes, que parecía un gran conejo, pues la forma de su nariz era igual al de uno, incluso sus mejillas, que en ese entonces eran un poco más notables, incluso por la forma en la que comía.

A veces parecía que Soyeon era la viva imagen de su madre, eran tan idénticas físicamente y en personalidad, eso contaba el mismo gusto por el mismo cantante, Huening Kai.

Llegaron al edificio dónde estaba su departamento y ambos bajaron del auto dejándolo en el estacionamiento, después de un largo día de trabajo finalmente podrían descansar, Soyeon estaba casi que se dormía, así que Soobin la tomó entre sus brazos y la dejó descansar sobre su hombro, llevándose a su niña cargando entre sus brazos.

Subió por el elevador, sintiendo como Soyeon caía dormida, a veces le sorprendía como podía estar activa todo el día sin casarse hasta que llegaba la noche y caía rendida apenas llegaban a casa, Soyeon era un caso especial pero la amaba demasiado, ella era su todo, pues es todo lo que le quedaba de la persona que amó tan fuerte.

Además de ser su única familia.

Años atrás...

Había sido un día muy agitado, pues había salido con su grupo de baile, habían quedado en salir al centro comercial para presentar Bang Bang del grupo famoso Big Bang.

Fue un éxito total su presentación, la gente les aplaudió y recibieron muchos halagos de las personas, a Soobin le motivaba siempre eso, que a la gente le gustará su baile.

En ese entonces Soobin tenía sólo 16 años, iba en preparatoria y tenía un gran sueño, quería ser idol, su sueño era debutar en un grupo y brillar en el escenario como siempre le había gustado y estaba en camino de eso, pues la siguiente semana presentaba una audición.

Obviamente todo a espaldas de sus padres.

Sus padres eran personas muy estrictas con Soobin, no dejaban que bailara porque pensaban que era un pérdida de tiempo, pues según los padres de Soobin decían que ese tiempo debería dedicarlo a estudiar, sin embargo a Soobin no le interesaba estudiar sólo para estar sentado horas en una silla o para atender a otras personas de sus problemas.

No, su sueño era cantar y bailar, tener un grupo y que la gente lo amara por su voz y talento.

Para salir a los ensayos y a las presentaciones Soobin le mentía a sus padres, mientras ellos pensaban que estaba en un grupo de estudio con sus compañeros de la escuela, el realmente estaba bailando con sus amigos, porque eso le apasionaba.

— Excelente presentación chicos, cada día estamos mejorando más — dijo Yeonjun, quién dirigía las coreografía de los chicos, pues Yeonjun era muy bueno bailando, añadiendo que iba a clases de baile los fines de semana.

— Hay que ir por teokbokki para celebrar que hoy lo hicimos bien — dijo Beomgyu, quien era novio de Yeonjun en ese entonces.

Todos asintieron, menos Soobin.

— Lo siento, hoy no podré acompañarlos, debo regresar a mi casa — dijo Soobin muy apenado.

— No, eres nuestro líder y debes venir amigo, aunque sea un rato, le dices a tus padres que "tus compañeros de estudio" quisieron ir a comer por el esfuerzo que han hecho todo este mes — dijo Yeonjun tratando de convencer a Soobin.